Ante la suspensión de todas las graduaciones debido al
coronavirus, el profesorado y las alumnas del ciclo formativo del grado superior de Educación Infantil diurno del Instituto
Abyla de Ceuta han decidido reinventarse. Utilizando las nuevas tecnologías, han creado un emotivo vídeo que cumpliría la función de convertirse en un recuerdo de una graduación fantasma. Esta iniciativa emerge gracias a las alumnas que, durante la cuarentena y en sustitución de las prácticas, han llevado a cabo numerosos vídeos en los que realizaban actividades para los niños, y decidieron que ahora se merecían un vídeo para ellas. Una de las partes más difíciles fue grabar en el instituto antes lleno de vida y de personas deseosas de aprender, y ahora cerrado y vacío. Según ha explicado la tutora y coordinadora de igualdad del centro Pilar Varea a El Faro de Ceuta, esta graduación representa un reflejo de la realidad que contrapone aquellas cuestiones que no se han podido realizar con las que sí se han conseguido a pesar de todo.
El montaje fue realizado por las propias alumnas y vio la luz el martes 30 de junio. Tras dos duros años no han podido realizar lo que se considera de mayor relevancia dentro del ciclo, las prácticas. Esto, junto a la graduación, fueron sus dos grandes pérdidas por lo que ambas se encuentran reflejadas en el vídeo en el que las protagonistas aparecen tanto con el babi, haciendo referencia a las prácticas, como con un atuendo más festivo, representando la graduación. La tutora describe a esta generación como buenas profesionales, creativas y dispuestas siempre a trabajar. Su mensaje de despedida hacia ellas sería el de instarlas a seguir creciendo, y les recuerda aquella frase que siempre les repetía en clase: “Educar es arte y un educador es un artista”. Por último, las anima a seguir luchando para sembrar la igualdad y el respeto en los más jóvenes. El acto de graduación simboliza el cierre de un ciclo y es uno de los momentos más importantes y emotivos de la vida de una persona, es por esto que tanto alumnas como profesoras no han querido dejar que el coronavirus les arrebate ese momento dejando que pase desapercibido.