El Servicio Marítimo de la Guardia Civil interceptó ayer a 16 subsaharianos entre los que se encontraba el propio patrón de la embarcación en la que viajaban. Éste fue detenido tras un intento de escapada. Una de las ocupantes es menor y está embarazada. F.K., de 25 años, se aparta del resto de inmigrantes. O mejor dicho, la Guardia Civil lo aparta porque sabe a ciencia cierta que el guineano enfundado en un chándal gris es quien patroneaba la embarcación neumática en la que otros 15 inmigrantes pusieron en la mañana de ayer su vida en peligro. De rostro serio, incluso dando muestras de enfado, unas simples tiras negras en sus muñecas lo diferencian del resto de inmigrantes que fueron trasladados pasadas las 10.00 horas al puerto deportivo. La Guardia Civil le acusa de ser el patrón de la embarcación y de, con su actitud, poner en peligro al resto de inmigrantes hasta el punto de provocar la caída de seis de ellos al mar. Dicen que a pesar de las advertencias del Servicio Marítimo, optó por huir arrojando el teléfono móvil al mar después de conversar con alguna persona que se mantenía al otro lado.
Ahora F.K. permanece bajo custodia de la Benemérita hasta que se proceda a su puesta a disposición judicial por un presunto delito contra los derechos de los extranjeros. En su atestado, la Guardia Civil ha hecho mención a su actitud que provocó la puesta en peligro de los demás inmigrantes y a que la propia neumática terminara hundiéndose en la travesía.
Este es el resultado final de un nuevo episodio migratorio cuyas alarmas mediáticas se conocían a primera hora de la mañana, cuando la oenegé Ca-minando Fronteras denunciaba a través de las redes sociales que se estaba produciendo una devolución en caliente en el mar, que los inmigrantes pedían auxilio pero que la Guardia Civil no intervenía esperando la llegada de las unidades marítimas marroquíes.
Según el Instituto Armado, la detección de la neumática fue registrada por el SIVE a las 9.00 horas en la bahía sur, navegando a unas millas de las costas españolas y todavía en aguas jurisdiccionales marroquíes. "Activado el correspondiente dispositivo, una embarcación del Servicio Marítimo se dirigió hacia la zona pudiendo observar cómo la neumática, provista de un pequeño motor que la propulsaba y con inmigrantes a bordo, se encontraba en aguas jurisdiccionales marroquíes", destacó en un comunicado oficial.
De acuerdo con el mismo, se instó al patrón a que detuviera la marcha para proceder a un rescate seguro, pero éste hizo caso omiso iniciando unas maniobras peligrosas que provocaron la caída de seis de los compatriotas al agua. "Ante dicha situación, los guardias que componían la tripulación se dirigieron de forma inmediata al punto procediendo al rescate de todos, teniendo que auxiliar de forma inmediata a alguno de ellos que se hundían por su carencia de flotabilidad", explica.
Desde el momento identificaron al piloto que, nada más ser desembarcado en la base del puerto deportivo, se le apartó del resto. El ERIE de Cruz Roja atendió a todos los subsaharianos, que presentaban cuadros de hipotermia leve. La única mujer del grupo tuvo que ser trasladada al Hospital. Es una menor de 16 años que se encuentra además embarazada.
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