Han tenido que pasar 4 años para que se dicte una sentencia condenatoria contra su persona en los juzgados de Ceuta. Finalmente el marroquí K.A. ha saldado sus deudas con la Justicia aceptando 3 meses de multa con una cuota de 3 euros diarios por incurrir en un delito de desobediencia.
Se ha aplicado la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas, dictándose sentencia firme por conformidad.
Dicho así puede resultar un caso rutinario pero buceando en la hemeroteca de sucesos e intervenciones policiales la acción al margen de la ley del ahora condenado terminó cobrando protagonismo mediático en su día.
Fue el 20 de febrero de 2019 cuando K.A. se encontraba en el interior de una vivienda que estaba siendo objeto de registro por parte de la Policía Nacional. Los agentes estaban llevando a cabo un despliegue sin igual en el Príncipe en busca de armamento.
Con ánimo de atentar contra la integridad de un policía nacional, K.A. le propinó un empujón y emprendió la huida por lo que tuvo que ser perseguido por el agente quien logró proceder a su arresto con apoyo de otros compañeros. Fue una fuga mediática e incluso grabada.
Al ahora condenado por un delito de desobediencia no se le había llegado a juzgar pero sí a otros dos implicados en este procedimiento, ‘Piolín’ y el apodado Canty.
Fue el Juzgado de lo Penal 1 (el mismo que ahora ha condenado a K.A.) el que dictó condena de 9 meses para el primero y 15 para el segundo por tenencia ilícita de armas y amenazas de muerte a policías, en cada uno de los casos.
Fruto de los registros policiales se intervino un arma. A pesar de que los agentes peinaron varias viviendas no dieron con el zulo que sospechaban existía y en donde se estaría ocultando más armamento. Esta intervención se produjo al poco de un nuevo suceso con empleo de armas de fuego que dejó a un joven herido e ingresado en el hospital.