En medio del caos, un testigo presencial, unas simples zapatillas.
Reflejan el trabajo duro, el crecimiento personal y el equilibrio entre la pasión por lo que haces y la habilidad para inspirar a otros.
El sol brillaba en todo su resplandor en Marrakesh, pero con miradas apagadas y tristes.
Los primeros en responder, enfrentándose a una frenética batalla para rescatar a las víctimas entre los restos de la devastación, dejando testimonios grabados y una gran apuesta por el compromiso con los damnificados.
Al hablar del suceso, cada uno pone el acento en un aspecto distinto, en tu caso lo que les distingue es el tono. La gente por la calle, niños desorientados, el sufrimiento y el desgarro de quien lo perdió todo.
La catástrofe había desafiado el optimismo...
Dedicado a mi compañero Rachid Sbihi.