Mi ritmo me lleva hacia unas lágrimas, donde invito a esa bailarina para que siga dando forma a ese arte, que solo se puede tener, entre estos aires tan frescos de mi Andalucía.
Prima esa raza, ese baile de sevillanas, que bien interpretadas dan salero a raudales a estas nenas que valen un capital. Y que nunca se venderán al mejor postor. Solo al arte. Ese que sus ancestros le han dado y que llevan en sus adentros.
No sé si serán las mezclas, los buenos vientos y el sol que gozamos, pero esto no se ve por ningún lado, solo aquí en mi tierra.
Donde nadie puede poner un impedimento de que la guapura y el arte se comparten de igual manera, que un buen vinito y un buen jamoncito.
Eso sí, si hay que ser buenos, que sean de los mejores y que de eso los tenemos. No sólo los de Osborne. Con ese semblante de buen toro, derramados por los montes, que hacen de reclamo a todo el que entra en estos pueblos de Andalucía.
Y pregunta por el mismo y se le dice que eso es arte y estampa de un buen andaluz.
Que mira a los cuernos y no tiene miedo, ya que la gallardía le riega por los cuatro costados y no piensa en una futura herida, sino en los aplausos de toda una plaza de toros, puestos en pie y diciendo: "olé".
Y es que este arte solo corre por las venas de nuestros andaluces.
Esos que están por todas partes, pero que solo piensan en una cosa, en volver lo antes posible a su Andalucía.
Para ver los pasos de Semana Santa y estar allí, disfrutar del arte de mover a sus imágenes, de los ritmos de sus bandas, que hacen temblar el escenario tan bonito de un hombre que ha venido a nuestra tierra a morir, ya que aquí merece la pena.
Y mientras las velas arden y se ven a los penitentes.
Y una nueva levantá es aplaudida, ya que saben los sudores que cuesta estar allí debajo de ese paso.
Muchos ensayos, muchas medidas para no castigar a los riñones, esas fajas que salvan todo. Aunque el Cristo está crucificado.
Y llega la salida y también la despedida y el himno de España suena con esa hermosura y esos aplausos que solo en esta Andalucía saben dar.
¡Viva Andalucía! ¡Vivan las cosas guapas que viven allí!