El número dos del Ministerio de Exteriores de Marruecos, Fouad Yazough, afirmó este miércoles en Rabat que "es momento de actuar en favor de migraciones seguras, ordenadas, regulares y benéficas para todos" y añadió que Marruecos es un "socio fiable" a la hora de trabajar en los aspectos migratorios.
Yazough, director general de Asuntos Políticos de Exteriores, participó este miércoles en Rabat en la apertura de la tercera Conferencia de Euromed Migración, junto a la embajadora de la Unión Europea en Marruecos, Patricia Llombart.
Antes de su intervención, Yazough afirmó a los periodistas que Marruecos ha sido el precursor de este encuentro y defendió que "la emigración requiere un tratamiento que no se reduzca a un aspecto policial, sino más bien humano, requiere un enfoque global".
Según dijo, la migración es un "tema importante y global al que Marruecos da una prioridad máxima" y su país, aseguró, "un socio responsable y de confianza en este ámbito".
Durante su intervención explicó que Marruecos, por su posición geográfica, es país de salida, tránsito y acogida de migrantes y cuenta con dos estrategias migratorias que "protegen los derechos y libertades fundamentales" de los extranjeros residentes en el país y de los marroquíes residentes fuera.
El número dos de Exteriores abogó por acciones como la producción de datos para orientar las políticas migratorias, el intercambio de información sobre las posibilidades de la migración regular, la aceleración de acuerdos interuniversitarios para reconocer los diplomas de las universidades a uno y otro lado del Mediterráneo y la promoción de un discurso positivo sobre la migración.
La migración entre las dos orillas del Mediterráneo, destacó, se ha acentuado con las crisis socio-económicas, los conflictos armados y el cambio climático, pero "los intercambios humanos son una oportunidad y un potencial de futuro para nuestras sociedades respectivas".
Embajadora de la UE: "Marruecos es un socio estratégico y global"
La embajadora de la UE explicó por su parte que "Marruecos es un socio estratégico y global, también en el campo de la migración", un fenómeno agravado tras la invasión rusa de Ucrania, que ha causado un flujo de 7 millones de refugiados en Europa, recordó.
"Todo esto nos ocupa y preocupa, porque tenemos una guerra en nuestras fronteras, pero eso no quiere decir que demos la espalda a nuestros socios del sur, muy al contrario", dijo Llombart, para recordar que "el Mediterráneo es una de las fronteras más desiguales del mundo".
La embajadora destacó el papel de las bandas organizadas en las migraciones: "Los traficantes de seres humanos no deben decidir en qué condición los migrantes entran, viven y trabajan en los diferentes países".
Y añadió que el objetivo de la UE es "evitar que los jóvenes quieran arriesgar su vida para llegar a la otra orilla cueste lo que cueste", dándoles oportunidades también en los países de origen y tránsito.