Este martes tuvo lugar la segunda operación del proyecto de cardiología valvular solidario iniciado desde la sección de Cooperación Internacional del Colegio de Médicos de Ceuta. Luvi, la paciente de 15 años, se sometió a dos cirugías en el Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz para tratar las complicaciones en su válvula mitral derivadas de una infección previa en las amígdalas, algo muy frecuente en Guinea, debido a la falta de recursos para el correcto tratamiento de ciertas enfermedades.
El hospital Puerta del Mar de Cádiz se ha volcado con el proyecto, sus cirujanos ya han llevado a cabo dos intervenciones a pacientes provenientes de Guinea-Bisáu y se han comprometido a seguir embarcados en esta iniciativa. Gracias a su ayuda, se está tratando una de las principales patologías del corazón de la zona y se evita con ello la muerte prematura de los pacientes bisauguineanos que pasan por su quirófano, dando el último paso del proyecto iniciado hace meses por el cardiólogo García Lanzas.
En esta ocasión, la operación a Luvi la realizó, junto con su equipo, el doctor Germán Calle, jefe del servicio de Hemodinámica de Cardiología en el hospital universitario gaditano. Además, también se unió a la intervención el doctor José María Hernández, el cual se acercó expresamente desde el hospital Virgen de la Victoria de Málaga para participar en la operación.
Tras dos cirugías para solucionar la estenosis mitral de Luvi, la joven fue llevada a planta, donde se encuentra recuperándose con total normalidad. (La estenosis mitral es el estrechamiento del orificio de la válvula mitral, la cual permite la llegada de la sangre desde la aurícula izquierda al ventrículo izquierdo del corazón).
El proyecto sigue creciendo
La iniciativa de crear un canal estable de operaciones solidarias de cardiología valvular a pacientes de Guinea-Bisáu es el resultado de meses de trabajo conjunto entre varias asociaciones. El impulso inicial y la organización han estado encabezados por la sección de Cooperación Internacional de Ceuta, con Francisco García Lanzas liderando el proyecto desde el primer minuto, pero ha sido un conjunto de empresas, profesionales y entidades públicas las que altruistamente han hecho posible cada intervención.
Los pacientes llegan a España gracias a la ONG Aida, encargada de la tramitación de todos los documentos y el traslado. Después, son acogidos junto con un acompañante en un hogar a través de la ONG Infancia Solidaria. Los gastos son sufragados por el Fondo de Cooperación Internacional del Sistema Andaluz de Salud (SAS), con apoyo de empresas y entidades que de manera solidaria se unen a la causa, en esta ocasión, Palex. El SAS, además, junto con el Hospital Universitario Puerta del Mar, permite la implicación de sus profesionales médicos y cede los espacios y equipos que son la base de esta iniciativa.
Mientras tanto, el Hospital Universitario de Ceuta (HUCE), a través del cardiólogo y director de Cooperación Internacional de Ceuta, sigue en contacto con los médicos de Guinea-Bisáu realizando una labor continua de telemedicina con el servicio de Cardiología de Ceuta. Gracias a esta formación, los profesionales locales son capaces de diagnosticar qué pacientes son aptos para llevar a cabo la cirugía, tras la comprobación que se brinda desde Ceuta. En el caso de Luvi, fue Almame, médico guineano instruido previamente por Francisco García Lanzas, el que detectó la anomalía en la válvula mitral y presentó el caso a los médicos de nuestra ciudad.
Pero esto no termina aquí, el siguiente paso es consolidar la formación de los médicos bisauguineanos y ampliar la zona de actuación a otros países con necesidades similares. En cuanto a lo primero, este domingo (10 de abril) llegan a Ceuta dos médicos de Guinea que estarán un par de meses aprendiendo en el hospital gracias al Colegio de Médicos y el HUCE. Y, sobre lo segundo, García Lanzas viajará próximamente a Santo Tomé y Príncipe para analizar la situación sanitaria en la zona y comenzar un plan de acción específico de formación en cardiología con los médicos locales.
Me alegro por ellos, hay gente en España que se ha muerto de tanto esperar.