Red Eléctrica de España (REE) presentará formalmente en Ceuta después de Semana Santa, concretamente el día 21 de abril en el Campus universitario, el proyecto de enlace submarino con la península que supondrá la mayor inversión de la historia para la ciudad, un total de 220,9 millones de euros que permitirá mejorar el suministro a la ciudadanía local y acceder al abastecimiento de renovables.
Al acto acudirán tanto la presidenta del operador del sistema, la exministra Beatriz Corredor, como su director general, Roberto García.
El proyecto, incluido en el Plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2021-2026 tras años de estudios y negociaciones con distintos municipios del Campo de Gibraltar para ubicar la subestación de la que partirá el doble cable que llegará hasta la ciudad autónoma por la explanada de El Chorrillo, debería estar operativo en 2025.
Su ejecución responde a un triple objetivo: “integrar el sistema eléctrico de Ceuta en el peninsular con objeto de aumentar sustancialmente la seguridad y calidad del suministro en la ciudad; reducir las necesidades de generación instalada en Ceuta; y rebajar los costes globales de generación y aumentar la integración de renovables”.
La actuación propuesta consiste en un enlace submarino entre el sistema eléctrico peninsular y el caballa que requerirá los siguientes desarrollos: una nueva subestación (‘Virgen de África’, de 132 kV) en Ceuta; otra en la provincia gaditana (‘Algeciras’, de 220 kV y la ampliación de la existente de 132 kV con dos transformadores 220/132 kV), dos circuitos en corriente alterna de 69 kilómetros de longitud cada uno a hasta 900 metros de profundidad máxima; y nueve reactancias en 132 kV de 20 MVAr cada una (siete en la península y dos en la ciudad autónoma).
Como alternativa se ha evaluado mantener el suministro de Ceuta en las condiciones actuales, lo cual supone la necesidad de utilizar generación menos eficiente y con mayores emisiones que la de la península, así como unos niveles de garantía de suministro menores en el sistema ceutí. También la conexión del enlace en la península en una nueva subestación en vez de en una subestación existente encontrando fuerte oposición social a las posibles ubicaciones, por lo que ambas se han desestimado.
Pese a la inversión que requerirá la ejecución del proyecto, muy superior a todo el desarrollo de Loma Colmenar, el Hospital universitario o la prisión, el beneficio socioeconómico calculado de su implementación se cifra en 29,7 millones de euros al año. Reducirá 299 kilotones de emisiones de CO2 cada ejercicio e integrará 473 Mvh de renovables.
Calidad y coste del suministro
Los ceutíes soporta un 55% más cortes eléctricos, tanto en número como en duración, que la media del conjunto de España, según los indicadores de calidad del suministro que se utilizan para medirla. Se trata del TIEPI (tiempo de interrupción equivalente de la potencia instalada en media tensión) y el NIEPI (número de interrupciones equivalente de la potencia instalada en media tensión).
Los indicadores de la ciudad son los segundos peores de toda España, sólo por delante de los de Melilla, y llegan a triplicar los de regiones como el País Vasco o Castilla-La Mancha, y a multiplicar casi por diez los de Asturias.
En términos de coste del abastecimiento, el encarecimiento de los combustibles ha multiplicado la factura que asume el Estado para equiparar a la media peninsular el desembolso que por la electricidad debe realizar el consumidor final local. Actualmente la generación en la central diésel de Endesa roza los mil euros por Mwh, casi cinco veces por encima del precio, ya de por sí disparado, del conjunto del país.
No para 2025, ni para 2050. Lo volvemos a sacar otra vez dentro de 2 años, justo antes de las generales.