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La nueva Ordenanza de limpieza y residuos iniciará su trámite parlamentario la próxima semana
El consejero de Medio Ambiente del Gobierno de Ceuta, Emilio Carreira, elevará la próxima semana al Pleno para su aprobación inicial el texto de la nueva Ordenanza de limpieza pública y residuos, que multiplicará el importe de las sanciones por comportamientos incívicos en la vía pública como orinar, sacudir alfombras a la calle, depositar la basura en los contenedores fuera del horario establecido o no recoger y limpiar los excrementos sólidos y líquidos de las mascotas, actos que quedarán tipificados como infracciones leves o graves sancionables con hasta 1.500 euros.
El texto eleva de 150 a 750 euros las multas por no depositar en las papeleras previstas al respecto los residuos sólidos de tamaño pequeño como papel, envoltorios y similares; “escupir o satisfacer las necesidades fisiológicas en la vía pública”; “sacudir ropas y alfombras desde balcones”; “depositar colillas u otras materias encendidas sin apagar en papeleras o contenedores”; o “esparcir y tirar toda clase de octavillas o colocar publicidad en los vehículos”.
La coalición Caballas intentará aprovechar el periodo de tramitación parlamentaria de la norma para sustituir las sanciones económicas cuando los infractores sean menores por trabajos formativos en beneficio de la comunidad que sirvan para concienciar a los incívicos.
En su redacción actual, el procedimiento sancionador de la futura norma establece que “cuando en actuaciones y conductas tipificadas en la presente Ordenanza se detecte la participación de menores de edad, el expediente sancionador se comunicará a sus padres, madres, tutores y tutoras”.
Estos “responderán solidariamente del pago de las sanciones derivadas de las infracciones cometidas por personas menores de edad, por no haber evitado como garante la comisión del hecho, en razón del incumplimiento de la obligación impuesta a los mismos, que conlleva un deber de prevenir la infracción administrativa cuya comisión se impute a los menores”.
Sin perjuicio de las responsabilidades penales o civiles correspondientes, las infracciones serán sancionables con entre 100 y 750 euros en el caso de las leves; de 750,01 a 1.500 las graves; y con hasta 3.000 las muy graves.
Hasta 750 euros por no retirar lo de las mascotas
“Depositar los residuos en los contenedores normalizados fuera del horario establecido”, que va desde las 21.00 horas hasta medianoche en primavera y verano y desde las 20.00 en otoño e invierno, pasará a ser considerado infracción grave y no leve, por lo que será sancionable con entre 750 y 1.500 euros. También se incrementan de forma considerable las multas, que hasta ahora no podían pasar de 150 euros, por “la no recogida de los excrementos sólidos de los animales por sus propietarios o acompañantes”, así como por “la no limpieza de la vía pública afectada por el excremento líquido del animal”.
El principio del fin de las bolsas de plástico de un solo uso
La nueva Ordenanza considerará infracción ‘muy grave’ y, por lo tanto, sancionable con hasta 3.000 euros de multa, entregar a partir del día 1 de enero de 2018 bolsas de un solo uso no biodegradables en los establecimientos comerciales. Desde esa fecha no se podrán distribuir bolsas de un solo uso de plástico no biodegradables destinadas al transporte y distribuidas en la caja. Será obligatorio utilizar “biodegradables u otras alternativas de tipo reutilizables (tela, de papel o cartón o similar)”.
Los comercios quedarán obligados, desde la entrada en vigor de la Ordenanza y hasta el día 31 de diciembre, a cobrar un precio de 10 céntimos de euro por cada bolsa de un solo uso de plástico no biodegradable que faciliten a los consumidores.
A partir de Año Nuevo, los establecimientos comerciales deberán cobrar un precio mínimo de 5 céntimos de euro (IPSI incluido) por cada bolsa biodegradable o reutilizable que entreguen. De manera transitoria, en lo que queda de este año tendrán que cobrar un precio mínimo de 10 céntimos de euro por este tipo de bolsa.
Las bolsas biodegradables deberán cumplir la Norma europea sobre ‘Envases y Embalajes’ que hace referencia a los requisitos que deben tener los envases y residuos de envases para ser valorizables mediante compostaje y biodegradación.