La ansiedad no es sólo una de las enfermedades de mayor incidencia en la sociedad sino que constituye una dolencia que a menudo sobrecarga la atención de los servicios médicos. Sin embargo, “la ansiedad es un mecanismo natural de los seres humanos, una respuesta fisiológica, psíquica o de conducta caracterizada por un estado de alerta”, explica Antonio González Muriana, médico especialista en los servicios de Emergencias ceutíes. “La finalidad de la ansiedad es fundamental, pues lo que hace es preparar al organismo para la acción”, dijo.
González Muriana ha atendido un buen número de casos de ese género debido al ejercicio en los servicios de Urgencias y Emergencias desde su llegada a Ceuta, en 1989. Ayer se dirigió a ‘El Faro’ para tratar el tema de la ansiedad, por su importancia y porque suele generar confusión entre los paciente. “No es lo mismo la ansiedad generalizada que la crisis o el ataque de ansiedad”, advirtió.
Alrededor de dos de cada diez ciudadanos padecen ansiedad, dolencia que alcanza un porcentaje del 30 o 40% en las consultas médicas y en los servicios de Urgencias y Emergencias. Los síntomas de la ansiedad “pueden ser físicos (pellizco en el estómago, opresión en el pecho, temblores, sudor excesivo, entre otros), psíquicos (inquietud interior o dificultad para la acción, entre otros) u otras alteraciones en la conducta”. Así lo señaló González Muriana, que quiso mencionar a a Rafael Navarro Pichardo, profesor de Psiquiatría de la Universidad de Granada y jefe del equipo del servicio psiquiátrico del hospital San Cecilio (Granada), como coautor de esta información.
Distinta es la crisis de ansiedad. Esta patología consiste en la “presencia de ansiedad recurrente, pero con la ausencia de trastornos estomacales, psiquiátricos o tóxicos que lo justifique y, sin embargo, una sintomatología que podría enumerarse con palpitaciones, dificultad para respirar, mareos, vértigo, llegando hasta el desmayo. Opresión en el pecho, hormigueo en las manos y en los pies, iniciados de un modo brusco, alcanza su máximo a los 10 minutos y sin durar normalmente más de una hora, dejando posteriormente un cansancio extremo”. Se trata de una patología frecuente y en aumento, pero, ante cualquier duda o pega, el paciente habrá de contactar con el médico de cabecera o con el 061”, indicó González Muriana, que mencionó con alta estima a Alfonso Turégano y señora.