La Guardia Civil de Guadalajara ha sorprendido a dos hombres que estaban recibiendo ayuda exterior mientras hacían el examen teórico del carné de conducir, por parte de dos personas que se comunicaban con ellos mediante sofisticados equipos técnicos audiovisuales, una de ellas desde Marruecos.
El instituto armado ha informado este jueves en una nota de prensa que el comportamiento de estos dos individuos, de 46 y 29 años y nacionalidad marroquí, levantó las sospechas de los agentes que estaban inspeccionando los exámenes teóricos para obtener el carné de conducir de clase B que se estaban haciendo en la Jefatura Provincial de Tráfico.
Los agentes esperaron a que finalizara la prueba con el fin de no interferir ni alterar el proceso de exámenes del resto de opositores.
Grandes dificultades para entender y hablar el castellano
Al identificarlos, detectaron que habían utilizado medios técnicos para envío de imágenes y recepción de audio, y también comprobaron que no tenían relación entre ellos y que ambos presentaban grandes dificultades para entender y hablar el castellano.
El hombre 29 años llevaba una mini-cámara con un pequeño agujero en el jersey, para tomar y enviar imágenes de las preguntas a través de un módem a una persona que estaba en Marruecos, según dijo él mismo a los agentes, así como un pinganillo.
El otro hombre utilizaba un teléfono móvil que lleva sujeto en el pecho para obtener las imágenes a través de un pequeño agujero que tenía en el jersey, así como un pinganillo para recibir las respuestas correctas que le enviaba una persona que se encontraba en Madrid, a la que había pagado 2.000 euros.
A mediados de año, la Dirección General de Seguridad Nacional de Marruecos (DGSN) informó del fraude detectado durante los exámenes de bachillerato para el curso escolar 2020-2021 que permitió la detención de 399 personas en todo el país, incluidas 343 sospechosas de cometer actos de fraude. El resto de los arrestados eran sospechosos de estar involucrados en casos relacionados con delitos de derecho común, incluidos casos de atentados a personas y bienes y posesión de objetos prohibidos para copiar en los exámenes, según informaron las autoridades marroquíes.