Los vecinos de Beliones y de Benzú se convirtieron en testigos esta madrugada del intento de entrada, a la desesperada, protagonizado por decenas de subsaharianos que querían acceder a Ceuta. Testigos improvisados que recogieron en sus teléfonos móviles cómo fueron esos primeros momentos en los que, en grupos dispersos, querían llegar a nado bordeando el espigón de Benzú.
Y así lo hicieron. Era la tercera vez consecutiva que lo hacían y la que más consiguieron llegar a la valla. Desesperados, los más fuertes fueron los que llegaron al arenal y se arrojaron al agua para cruzar. Pero se toparon con un blindaje absoluto por parte de las fuerzas auxiliares marroquíes tanto en la propia playa como en el mar, mientras la Guardia Civil también desplegaba sus unidades en el lado español. Toda esta zona ha sido blindada con concertinas además de colocarse puertas a modo de obstáculo para evitar las carreras hacia el paso.
Las sirenas de las alarmas, que siempre suenan cuando hay un intento de entrada, se mezclaban con los gritos de los presentes y el sonido del material antidisturbio, además de las luces de emergencia. Todos los subsaharianos fueron contenidos fuera de los espigones, sin que ninguno de los varones lograra entrar.
Desde la noche del pasado domingo hasta esta pasada madrugada, los intentos de acercamiento siempre por el paso de Beliones con Benzú han sido repetidos. Muchos de los participantes logran escapar, pero una amplia mayoría termina siendo detenido por las fuerzas de seguridad, lo que significa el final de su aproximación a Ceuta.
La población subsahariana que se encuentra en la zona más cercana a la ciudad se concentra cuando intenta el acercamiento, buscando de esta manera el factor sorpresa para evitar asentarse en las chabolas que puedan ser detectadas y desmanteladas por las fuerzas de seguridad.
Durante toda la noche hubo batidas por el monte, por las proximidades de la Mujer Muerta y por la zona marítima más próxima a los espigones.
Venían preguntando por el Sr Arostegui, a ver si los acogian a todos en la sede de CC OO para comer langostinos allí...y ya de camino los pillaban de avanzadilla en manifestaciones para protestar por el precio de la luz.
Las 7 primeras noticias de temas que según Vivas no son por lo que se tiene que conocer a Ceuta. Sin embargo la culpa es de los que crispan
Esto es tremendo.
Por un lado pensar que son seres humanos, y que es la desesperación, el hambre, la explotación y la miseria lo que les lleva a este tipo de actitudes en las que arriesgan su vida porque no tienen nada que perder.
Por otra la idea de que si se les permite entrar sin más, nuestra ciudad se va a convertir en un lugar en el que la vida va a ser imposible, en el que al final acabarán entrando no 1.000 por año, sino 1.000 por día.
Un dilema imposible, la cuadratura del círculo, lo que sintieron los pasajeros del Titánic que habían podido subirse a una barca viendo que sus compañeros de viaje se ahogaban.
Una pena.
El que arriesga su vida es el policía. Nadie ha muerto al saltar la valla.
Claro, es q con nuestra actitud demostramos q esto es jauja.
Si hicieramos como los británicos en Gibraltar , otro gallo cantaría.