Se ha llegado al final del curso y es tiempo de celebraciones en forma de graduación. Eso es lo que han hecho este viernes, por segundo día consecutivo, desde el céntrico colegio de La Inmaculada de Ceuta, cuyo alumnado de 4º de ESO del curso anterior -el curso que siempre quedará como el que se paró por la pandemia, el 2019/20- ha podido celebrar como se merece su acto de graduación.
Y es que el año pasado no pudo ser, debido a la tan difícil situación sanitaria, pero en esta ocasión sí. Y aunque sea con un año de retraso, se ha celebrado. Alumnos y alumnas que ahora cursan 1º de Bachillerato -o Formación Profesional- han sido los protagonistas de este viernes, pero no por la etapa que han terminado en este curso, sino por la que finalizaron hace un año, la Educación Secundario Obligatoria.
Esta graduación, pospuesta por el coronavirus, ha estado llena de recuerdos y emoción. Los discursos de despedida se han mezclado con los vividos tanto este año como el pasado. Han sido dos cursos muy difíciles, que siempre quedarán en el recuerdo como aquellos en los que hubo que adaptarse a situaciones totalmente novedosas como la obligatoriedad de ir a clase en mascarilla, la distancia y el poco contacto entre compañeros y amigos. Todo ello unido a los últimos meses de clase del anterior curso, por el que este viernes se han graduado, en los que las clases se hacían de forma online.
Aplausos, alegría y reconocimientos es lo que se ha vivido este viernes en 'La Inmaculada', con la unión entre alumnos, familiares y docentes, toda la comunidad educativa reconociendo a la generación del futuro, mucho de los cuales ya están en 1º de Bachillerato -ya que otros optan por el camino de grados de Formación Profesional (FP)- tras finalizar la etapa de la ESO.