Esta semana se ha iniciado el proceso de vacunación de los militares de la Comandancia General de Ceuta (Comgeceu) bajo la dirección de los Servicios Sanitarios del Ministerio de Defensa, según confirmaron este martes fuentes oficiales. La guarnición local está formada por unos 3.300 efectivos, según los datos del último Boletín de Personal al servicio de las Administraciones Públicas.
El lunes 29 de marzo se ha iniciado el proceso de vacunación del personal civil y militar que depende de la Administración Militar en la guarnición de Ceuta, habiéndose vacunado a 2.100 efectivos.
Las dosis de Pfizer entregadas a Defensa se habían asignado hasta ahora a personal sanitario militar, puestos críticos, soldados a desplegar en zona de operaciones y personal de la UME con más de 55 años.
Las de AstraZeneca se han asignado a efectivos de la Unidad Militar de Emergencia mayores de esa edad, adscritos a centros docentes militares y a soldados que preparan despliegues o ya están en zona de operaciones.
Habían sido varias las peticiones en el ámbito militar para vacunar a los respectivos miembros de las Fuerzas Armadas, pero no ha sido hasta ahora cuando se ha iniciado el proceso. Especialmente críticas fueron asociaciones de militares cuando se dio el caso de la vacunación de altos cargos de Defensa, como el del jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el general Miguel Ángel Villarroya, que acabó dimitiendo, mientras otros rangos inferiores seguían esperando la vacuna.
Todo se enmarca en un proceso aún lento de vacunación, con la esperanza de que pueda acelerar a partir de este mes de abril que ahora comienza. Este mismo martes se conoció que una nueva actualización de la Estrategia de Vacunación -la quinta- que prevé que cuando haya disponibilidad de dosis de la nueva vacuna de Janssen se pueda usar de forma paralela a las vacunas de Pfizer y Moderna para incrementar el ritmo de vacunación de los grupos de más edad.
Sin especificar a las Fuerzas Armadas, este documento también especifica que la vacuna de AstraZeneca completará la vacunación de los grupos de población priorizados por su actividad esencial, como personal sanitario y sociosanitario que no es de primera línea y trabajadores de instituciones sanitarias y colectivos en activo con una función esencial en la sociedad como los de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado
Bueno, también están en muchos casos en primera línea, debería de tener prioridad los militares, como los policías y bomberos.