Ceuta cuenta con un amplio patrimonio, más amplio de lo que los propios ceutíes podrían imaginar. “Tenemos del orden de cerca de algo más de 90 elementos declarados Bien de Interés Cultural (BIC) y están agrupados en conjuntos históricos, que son cinco”, cuenta el presidente de la Asociación Septem Nostra, José Manuel Pérez Rivera. Dos de esos conjuntos históricos se encuentran en la zona del Monte Hacho, “uno es la fortaleza y luego el de las fortificaciones, que es el recinto del Hacho (declarado como conjunto en 1997), con fuertes, atalayas, torres y caminos, que están en el borde marítimo”, explica.
La cala del Desnarigado es una de las zonas donde más se concentran este tipo de elementos fortificados, entre ellos la muralla que se construyó en la playa para cerrarla y evitar la entrada de enemigos a Ceuta. Precisamente, esta construcción de la cala, desde el pasado verano “se observó que parte de la muralla oriental presentaba un mal estado de conservación”. Pero este no es el único problema, puesto que, según indica Pérez Rivera, “hubo un desprendimiento en verano, han caído partes, lo que es un claro síntoma de que la muralla tiene un grave problema de conservación y también supone un peligro porque es una zona que está abierta y una playa muy frecuentada”.
Hace casi 25 años que esta muralla, y el resto de fortificaciones y elementos que forman parte de este conjunto histórico, fue declarada como tal y, desde entonces, sigue sin tener un plan de recuperación que se le atribuye en el momento de esa declaración. “Cuando se declara un conjunto histórico, el Ayuntamiento tiene que aprobar y redactar un documento urbanístico, un plan especial de protección y desde que se declaró no se ha hecho ese plan y lo hemos reclamado en multitud de ocasiones”, asegura.
Desde la Asociación Septem Nostra señalan que hay dos razones para actuar en estas murallas: la protección de un BIC de la ciudad y la seguridad de los ceutíes cuando acuden a esta playa, ya que pueden seguir produciéndose desprendimientos. “Nos preocupa ese lienzo de la muralla, porque si sigue habiendo desprendimientos pueden seguir cayendo más trozos. Aquí las administraciones tienen que mantener y proteger, sobre todo, cuando están declarados BIC”, señala.
Según apuntan desde esta asociación ceutí, preocupada por el patrimonio de la ciudad, “están obligados los ayuntamientos a redactar un plan especial de protección, que se haga un estudio de diagnóstico de esos bienes y que establezca una serie de medidas concretas para la recuperación y restauración”. Que estas murallas presenten este estado, está “evidenciando que falta una mayor atención”.
Sin embargo, esta situación se vuelve un poco más preocupante debido a que esta muralla pertenece a lo que fue la Batería de Torrecilla y, además, se encuentra situada en la línea de cosa. Por este motivo, según señala Pérez Rivera, “parece que una parte está adscrito al dominio público marítimo-terrestre, que sería el Ministerio de Medio Ambiente el que se vería obligado a tomar medidas para recuperar esos bienes”. Pero también puede que “que sea una parte del Ministerio de Defensa. No está claro”.
Aunque en el aire está este debate, no tiene nada que ver con el plan especial que tendría que haber realizado la Ciudad. “Es una obligación única y exclusiva de la Ciudad Autónoma de Ceuta. ¿Ahora, a quién tiene que exigírsele que restaure y recupere ese lienzo?”, se cuestiona. Esta incógnita la tienen que “dilucidar” las administraciones.
Lo que tienen muy claro desde Septem Nostra es que “es urgente actuar para asegurar ese espacio y evitar posibles daños a personas”. La situación, en general, de los elementos del Monte Hacho “pues es bastante preocupante. Es como un síntoma evidente de que requiere mayor atención y el Ayuntamiento tiene una obligación. Han pasado casi 25 años y no han hecho todavía ese proyecto especial”, concluye Pérez Rivera.
Que sea medio Ambiente o que sea el Ministerio de Defensa el que tenga que acometer los arreglos es lo de menos, lo mas importante es LA SEGURIDAD de los que pasean por la zona, ya que el trozo de muro que ha caído y aparece en la foto es enorme y si pilla a alguien lo mata. Si tan mal está, lo primero es prohibir la circulación por la zona que pueda verse afectada por los desprendimientos. Es mejor prevenir que lamentarnos.
En esta ciudad el patrimonio declarado BIC esta practicamente abandonado. Hay una desidia total y asi nos va. Solo hay que ver lo que ha ocurrido esta semana con la bateria de Valdeaguas que estaba okupada y llena de basura. Cualquier dia se meten los "mal llamados okupas" en las murallas Merinidas y no pasa nada.
Con una pequeña inversión en la cala del desnarigado se puede hacer mucho, no hay ganas, no hay ideas, no hay voluntad por preservar el patrimonio y el entorno natural que lo rodea. Solo hay dejadez en estos asuntos, la inacción es insultante. Con todos los recursos económicos que manejan, como no se puede invertir algo en la restauración de los innumerables elementos patrimoniales de la ciudad ?, muchos de los cuales son BIC. Por favor que algún periodista analice, cuantas intervenciones ha promovido la Ciudad en estos asuntos en los últimos 20 años, las cuales no se hallan financiado a través del Ministerio de Cultura. Lo dicho es una desvergüenza, tenemos políticos cortoplacistas atrincherados en sus despachos y a la espera de que no ocurra nada, así no habrá nada que hacer.
Si fuese para remodelar, otra vez, la cocina del ceti, seguro que ahora sacaban. As de 50000 euros... Para el patrimonio, no hay dinero.
Es terrible el deteriorado aspecto de un enclave tan especial, único y envolvente como nuestra Cala del Desnarigado. Tanto la muralla como toda la solería (por llamarlo de alguna manera), accesos y facilidades se encuentran en un estado deplorable para lo que debería de ser un punto referente de paseo y disfrute para el ciudadano, y más aún desde la óptica del turismo, ya que se vende por sí mismo. Por añadir más, los acontecimientos históricos que dieron nombre a este enclave, dignos de película o libro de aventuras, son una lástima el no sacarle cierto rédito en toda la zona. Una pena