El Gobierno de Ceuta utilizará las instalaciones del antiguo hospital de la Cruz Roja solo en el caso de que fuera necesario si se produjera alguna llegada masiva de inmigrantes que debieran ser puestos en cuarentena. Así lo ha confirmado el portavoz accidental del Ejecutivo local, Carlos Rontomé, quien ha lamentado que por parte del Gobierno no se asuman sus competencias que pasan por hacerse cargo de la inmigración.
“La Ciudad se hace cargo” de estos inmigrantes “porque hay una orden de la Secretaría de Estado, cumplimos con la norma pero nos hemos hecho cargo de una competencia sin tener recursos, estructuras ni personal. Hay espacios como el CETI que podrían ser usados y se nos pide a nosotros que aislemos a los inmigrantes por cuestión de salud pública pero, en cambio, no se nos refuerza. Esto lo sufrimos las autonomías a donde llegan inmigrantes de forma importante”, ha denunciado Rontomé quien considera que se está incurriendo en “una dejación de funciones” por parte del Gobierno central en materia de inmigración.
En Ceuta se cumple el protocolo pero además se ha reforzado con un propio, que ha sido trasladado a la Delegación sin que se haya emitido información negativa al respecto. Mientras las llegadas puedan ser controladas, los inmigrantes permanecerán en pensiones, ya que el antiguo hospital va a ser un recurso de última hora cuando la cantidad de personas no puedan ser controladas por la vía actual.
“El antiguo hospital es un recurso habilitado por la negativa de habilitar espacios para ello como el CETI. Se ha terminado la parte de acondicionamiento, duchas y calentadores y está pendiente por si fuera necesario. Vamos a mantenerlo como opción y Cruz Roja se ha ofrecido a implementar la atención a estos inmigrantes si se confinaran en ese espacio. Ha hecho una oferta pero lo lógico es que el Estado se hiciera cargo del mantenimiento ya que hay espacios para ello como el CETI”, ha razonado el portavoz.
La Ciudad asegura que, mientras tanto, los inmigrantes que están en las pensiones cumplen el aislamiento ya que se les hace firmar un documento de compromiso. “Hasta ahora no ha habido problemas, cumplen la cuarentena, no hemos tenido información de pegas o fugas”, ha sentenciado, pese a las críticas de ciudadanos que aseguraban lo contrario. Indica la Ciudad que Sanidad se encarga además de controlar esa evolución como la de personas que están en sus hogares.
Sobre la presencia de los demás marroquíes que continúan en la nave del Tarajal no hay nada nuevo. La Ciudad de hecho se ofreció a costear la repatriación de las mismas vía Tánger, sin que por parte de la Secretaría de Estado de Inmigración se haya dado una respuesta a tal oferta.
Rontomé sabe perfectamente que Ceuta es un macrocentro de inmigrantes para que no lleguen a la Península.
No quieren verlos por Málaga, Huelva, Valencia o Barcelona paseando. A los ceutíes que nos den. Y los peninsulares tan tranquilos.
Lo sabe y calla. Echando la pelota al gobierno central, cuando es una política dirigida desde hace muchos años.