El pase de 104 kilos de hachís que fue frustrado por la Benemérita la pasada semana en pleno perímetro fronterizo puso al descubierto un canal directo entre quienes esperaban la recepción de la droga, que huyeron en dirección al Príncipe, y quienes permitieron que otros la acercaran e introdujeran por el vallado, agentes de servicio en el lado marroquí.
La intervención de patrullas del Instituto Armado evitó que el trasvase del hachís se llevara a efecto, aunque no se pudo conseguir la detención de las personas implicadas en el negocio. No es ni la primera vez que la Benemérita se incauta de droga en el perímetro ni es la primera que Marruecos ordena el de traslado de una comisión de investigación para frenar posibles corruptelas.