Hace pocos días leímos en ‘Ceutaldia’, conocido medio digital de Ceuta, que Ecologistas en Acción exculpaba a la Autoridad Portuaria de Ceuta y culpabilizaba a la Ciudad, al Ministerio y a la SEO de la situación de las gaviotas de Audouin. Antes de comentar el titular y la información que se daba en el medio digital nos gustaría indicar que mantenemos una excelente relación con el grupo local de la SEO en Ceuta y reconocemos la buena labor que llevan realizando en el conocimiento, divulgación y conservación de las aves y los espacios protegidos en nuestra ciudad. Con algunos de ellos nos une una sincera relación de amistad desde hace muchos años. Ciertamente no estamos dispuestos que una información sesgada enturbie una fructífera relación de colaboración entre defensores de la naturaleza. Por lo que se deduce de lo publicado en el mentado medio digital se ha ofrecido una información parcial de la realidad, que confiamos no sea el estilo periodístico que se practica de forma habitual sino fruto de un error sin la intención malsana de crear cizalla o perseguir otros intereses. Al conocer algunas personas que trabajan en el aludido periódico digital nos inclinamos a pensar en un error de apreciación fruto del trabajo precipitado que tienen que realizar los periodistas hoy en día y del aluvión de medios digitales que pululan por las redes de la información. Sea lo que fuere, la información está extraída de la publicación del informe banderas negras de este año 2020 que coordina nuestra amiga Clara Megías Baños.
Sin embargo, lo que ha olvidado mencionar Ceutaldia es que en el informe también se indica “a la APC se le achaca no haber controlado adecuadamente la actuación de la empresa que se dedica al mantenimiento de la limpieza de sus instalaciones….” Por otra parte, también se olvidó indicar que en el informe de Banderas Negras se concedía el galardón negativo a la zona de cría del puerto de Ceuta “…que por limpiar la zona destruyeron los nidos allí instalados, todo un atentado ecológico y delito ambiental investigado por el Seprona….”. En fin, todo lo que decimos se puede comprobar fácilmente consultando el informe de Banderas Negras 2020. Por todo lo expuesto se puede intuir fácilmente que una información así dada dirigie la atención del lector hacia un determinado contenido sin otorgar la oportunidad de formarse un juicio crítico adecuado. Además, con este tipo de prácticas periodísticas se promueve la participación de los “haters” eternos que siempre aprovechan cualquier oportunidad para verter su veneno en cualquier tema polémico dentro del apartado de comentarios que tienen los medios digitales.
La discrepancia con la SEO a nivel nacional (no pienso que sea el parecer mayoritario de los compañeros de Ceuta) se produce cuando se procura un protocolo para impedir la nidada de la especie de gaviota en el terreno portuario de la trasera del Parque del Mediterráneo. Pensamos que se debe propiciar una transición hacia la naturalización de nuestras ciudades y entornos urbanos en contraposición al desarrollismo imperante y concepto del urbanismo altamente alienante practicado por el entramado del poder. La transición hacia la sostenibilidad nos espera y augura una gran tarea reformadora de nuestras ciudades que conllevará su re-naturalización. Las aves son una gran avanzadilla zoológica de esta marea ciudadana en marcha y siempre lo han sido por capacidad de adaptación a nuevos entornos y la gran cantidad de personas admiradoras de estos entrañables compañeros de la vida en el planeta.
En nuestra asociación contamos con Clara Benhamu y Paco Pereila, dos personas que ayudan eficientemente a la rehabilitación de aves heridas haciendo todo lo que pueden para ayudar a sacar adelante a los vencejos, gorriones, estorninos, etc que lo necesitan en colaboración con el coordinador del grupo local de la SEO-Birdlife, Miguel Ángel Guirado. De esta forma los seres humanos formamos alianzas imperecederas de amistad y biofilia con otros seres vivos. El avance imparable de los espacios verdes incrementarán las poblaciones animales y podremos compartir la ciudad con todos sus habitantes. Las ciudades han sido construidas en entornos naturales aventajados debido a diversas condiciones naturales; su posición geográfica, por albergar puertos seguros, poseer abundantes materiales para la construcción, terrenos cultivables, costas con recursos pesqueros y sobretodo tener fuentes de suministro acuífero para mantener los asentamientos y la productividad de los cultivos. El ámbito portuario de Ceuta es muy apropiado para realizar esta transición pues lleva más de una década trabajando firmemente y desarrollando mejoras ambientales contrastables tanto en su medio marino como en sus infraestructuras. Obviamente queda mucho camino por recorrer y algunas de sus actividades como el bunkering son altamente peligrosas pero ha abandonado definitivamente la política de ampliaciones a costa del medio marino y está en condiciones de pilotar esta transición en todo su ámbito de actuación.
Además al tener un sistema de indicadores biológicos marinos establecido en sus aguas y muelles, el mantenimiento estacional de la nidada de la gaviota de Audouin solo sería un paso más en el desarrollo ambiental que viene promoviendo la APC.
No entendemos la creciente moda de denostar a las gaviotas y en especial a la patiamarilla. Se puede ejercer un inteligente control de la población pero en ningún caso tratarlas como si fueran animales dañinos y perniciosos. El estilo de vida alienante y egoísta lleva a muchas personas a trastornarse y obsesionarse tontamente con las gaviotas y pierden el necesario enfoque para percatarse de la creciente contaminación que nos rodea proveniente de diversos focos dispersos en la ciudad. La contaminación atmosférica, el exceso de tráfico rodado (la elevada población de vehículos no se quiere controlar), la contaminación acústica o las salidas intermitentes de aguas fecales y las basuras acumuladas en las costas sí que deberían ser asuntos preocupantes para la gran mayoría de los ciudadanos y no las inocentes gaviotas que además aportan sonido y colorido a una ciudad costera y litoral como es Ceuta. En muchos países hay especies de aves marinas que anidan bajo las casas enclavadas en la costa y es muchos países del hemisferio sur es muy normal y agradable observar a las gaviotas pacíficas deambular por paseos y avenidas; en Ceuta se puede disfrutar del vuelo de los vencejos que aprovechan muchos huecos de las viviendas antiguas para anidar año tras año. Algunas viviendas también sustentan poblaciones de murciélagos que encuentra su morada en determinadas grietas; las primillas, algunos búhos y muchas otras aves se pueden observar asociadas al entorno urbano. Compartir el espacio que nos ha sido dado con los demás seres vivos es tanto un deber como un ejercicio placentero de sana convivencia siempre y cuando se mantengan las condiciones de salubridad necesarias y bajo la atenta supervisión de nuestros veterinarios y médicos.
No hay una gran población de gaviota de Audouin en Ceuta, ya nos gustaría, así que los protocolos de seguridad de Aena tendrán que adaptarse a las circunstancias portuarias y al medio natural de Ceuta y no al revés. Por otra parte, con el bajo vuelo de esta gaviota y su escaso número no vemos que represente ningún peligro real para el escaso tráfico aéreo que se produce a diario en la marinera ciudad. Conviene indicar que la mentada entidad de gestión aeroportuaria se constituye como una empresa de capital mixto con un estilo de actuación poco edificante en algunas de sus actuaciones y que parece aunar lo peor de los dos ámbitos (público y privado). Es capaz de hurtar el espacio público aeroportuario de todos los españoles y venderlo al comercio del “duty free” en condiciones aberrantes (basta que se fijen que cuando se pasa los controles de los aeropuertos hay que ir sorteando puestos de venta de alcohol, tabaco, dulces y cosméticos). Como he presentado ya varias reclamaciones, sé que practica la política de la subcontratación a muy bajo precio (pregunten lo que están cobrando los trabajadores que gestionan los servicios de información al público) e ignora sistemáticamente los requerimientos de las administraciones autonómicas (la propia Junta de Andalucía me lo ha hecho saber con su respuesta a una queja reiterativa) ante las quejas que reciben de los usuarios de los aeropuertos por las inapropiadas concesiones comerciales a los productos libres de impuestos.