Tras el anuncio del Gobierno de la Ciudad de no pedir al Ejecutivo de la Nación el pase de Ceuta a la fase 3 por precaución ante los brotes de coronavirus surgidos en los últimos días, la Central sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha solicitado que ante esta novedad, se paralice el avance de reincorporación del personal ante este repunte.
CSIF ha solicitado que se cumpla el séptimo párrafo del punto 2 del Decreto de la Consejería de Hacienda, Economía y Función Pública de la Ciudad de Ceuta de 8 de mayo de 2020, por el que se organiza la vuelta a la actividad publicado en el BOCCE Extraordinario número 39 del 8 de mayo de 2020 el cual, se incluyó a petición de CSIF y obliga a la Administración a no avanzar a la última fase de reincorporación.
La inclusión de dicho requisito para avanzar de fase en la reincorporación de personal incluido a petición de CSIF, preveía que, si la ciudad tenía un repunte, la paralización en unas fase e incluso, el atraso de una fase, la reincorporación del personal fuera en consonancia con el aumento de fases de la propia ciudad, evitando así, que se siguiera incrementando el número de empleados trabajando físicamente si la situación no fuera favorable pudiendo provocar, un repunte de los casos afectados en la ciudad.
En la actualidad, todos los empleados públicos no esenciales están trabajando físicamente realizando turnos de un máximo de dos tercios de los mismos por departamento u oficina y en la mayoría de los casos, cuando no asisten presencialmente realizan trabajo a distancia.
Los empleados públicos de los servicios esenciales se encuentran trabajando al completo y a pleno rendimiento desde el inicio del estado de alarma, muchos de ellos, realizando horas extraordinarias habitualmente. "Horas extraordinarias que, no han cobrado ni uno de los empleados públicos de toda la Ciudad autónoma desde octubre del pasado año, algo inconcebible", finaliza CSIF.