Karim Enfedal Mahayub, también conocido por sus amigos como ‘Mono’ (mote que específicamente ha querido se que publique), ha sido víctima de un bulo por redes sociales. Desde que este jueves saltó la noticia de que uno de los trabajadores del Burger King estaba contagiado por coronavirus, un individuo, al que ni la víctima ni su círculo cercano conocen, se ha dedicado a difundir que está contagiado por COVID-19. Y no es verdad. Esto no es un juego, es una enfermedad que ha creado una catástrofe en nuestro país.
El sujeto, que ya ha sido denunciado por acusar directamente al trabajador de Burger King, responde a las iniciales de M.R.P., y en su perfil de la red social ha estado advirtiendo a los vecinos de Karim para que no se acercaran a él. "Ten cuidado que en tu bloque hay un infectado, el Karin mono está infectado, es repartidor del Burger King. Así que cuidado", escribió esta persona en Facebook.
La familia del repartidor está angustiada, a la vez que asustada, porque no saben quién es este individuo. Karim y su mujer han tenido que soportar, durante varios días, que sus vecinos de bloque aparezcan en la puerta de su casa para preguntar cómo estaban ellos sus hijos. El matrimonio asegura que están todos bien y que el ‘acusado’ de tener el virus está perfectamente, además este jueves acudieron al Hospital Universitario para someterse a una exploración.
Cristina Pérez, mujer de la víctima de estas mentiras que corren por redes sociales, asegura que “mi marido no es el infectado pero esta persona no para de difundir bulos. Ya está denunciado porque esta situación no puede continuar así”. El individuo está arremetiendo contra ellos en redes sociales y está “señalando directamente a mi casa y a mis hijos”, dice la mujer, “si mi marido fuera el infectado sería la primera que lo digo y nos encerramos todos en casa”.
La familia la componen una niña de cinco años y otros dos niños de once y doce, y “con ellos no se puede jugar. Están asustados porque ahora todo el mundo piensa que estamos enfermos. Mis hijos no quieren ni salir a la calle”. Los vecinos les han tocado a la puerta más de una vez para asegurarse y ya no saben qué hacer para “dejar claro que Karim no tiene coronavirus y los niños tampoco”.