Convivir en valores, donde no sólo vale jugar al fútbol, como explicaba Virginia Vicente, monitora de la Territorial ceutí, es lo que ha puesto en práctica la Federación de Fútbol de Ceuta en la primera Jornada de Convivencia de Escuelas de la federación que ha organizado para este sábado en el campo Emilio Cózar la ‘Ciudad del Fútbol’.
Los alumnos que forman parte de las mismas, durante la temporada, han disfrutado de varias actividades como juegos y partidillos, y han participado en una charla-coloquio donde se han tratado temas como el bullying, el racismo o el sexismo en el mundo del deporte.
Virginia Vicente, monitora de la FFCE, asegura que el tema del sexismo en el ámbito deportivo está aún por mejorar, pero que la labor que llevan a cabo los centros educativos, tratando tanto este tema como el del racismo o el bullying, llevará a erradicar este problema social.
Las Escuelas participantes han sido las de Fútbol 8, Puente Quemadero, CEIP Ramón y Cajal, CEIP Príncipe Felipe, CEIP Reina Sofía, CEIP Juan Carlos I y CEIP Andrés Manjón.
Para llevar a cabo esta jornada se han tenido que implicar muchos estamentos, como el de los monitores y entrenadores, y en el caso del monitor Mohamed El Haddaouy son actividades que se viven con muchas ganas porque no sólo se enseña a los niños a mejorar en la práctica deportiva, también a ser buenas personas.
En las escuelas de la federación participan semanalmente unos 500 niños y la federación pretende, para que todos puedan participar de esta actividad, repetirla destinándola a otras edades. Dani Olsson, director de la escuela de la FFCE, ha destacado que esta jornada se seguirá poniendo en práctica a lo largo de la temporada.
Todo evento alrededor de un deporte de equipo no se podría llevar a cabo sin la figura del árbitro y, en esta jornada, este estamento ha estado representado por Said y Kassen, dos instituciones del arbitraje ceutí a los que no les pesan los años. Kassen Mohamed asegura que, tanto para él como para ‘Caramba’, es una satisfacción participar y que seguirán en ellas hasta que el cuerpo aguante.
Pero los protagonistas de esta historia son ellos, los más pequeños, y lo que buscan es pasarlo bien.