La Asociación Unificada de Guardias Civiles -AUGC- ha pedido más controles policiales en el puerto tras la oleada de robos registrada y el repunte en la inseguridad. Lo hace después de que un inmigrante de las escolleras, ya identificado por varios testigos, apuñalara a un vigilante del cash and carry del puerto, que ese mismo día le había llamado la atención al molestar, borracho, a la clientela. El vigilante, que pasó toda la noche en observación del hospital, está en buen estado, después de que sufriera una herida en el tórax producida con arma blanca.
Controles específicos
Para AUGC este hecho obliga a identificar a los inmigrantes que merodean por la zona, algo que ya pidió cuando los guardias de la unidad Fiscal fueron apedreados hace un par de semanas por un número de sin papeles que pretendían embarcar de manera clandestina.
La Asociación de Guardias Civiles recoge además las quejas de los vecinos del puerto por la cantidad de robos que se están produciendo en los coches allí estacionados. Se sospecha que quienes se dedican a desguazar vehículos y sustraer piezas de los coches abandonados también retiran aquellas que les interesan de los vehículos de personas que trabajan en la zona portuaria.
La gran cantidad de coches abandonados en el puerto facilita este tipo de prácticas.