El estudio español Lamela denuncia que el arquitecto marroquí Nawfal Bakhat les ha 'robado' el diseño del Gran Estadio de Tetuán, un nuevo campo de fútbol de esta ciudad del norte de Marruecos, muy cerca de Ceuta, y que este diseñador se habría apoderado del proyecto al 100% cuando acordaron que irían al 50%.
En conversación con El Faro de Ceuta, Francisco de Arratia, consejero del Estudio Lamela, explica el calvario por el que están pasando, debido a que ellos aportaron su conocimiento para esta obra faraónica en la ciudad de Tetuán, siendo una marca de reconocido prestigio y con varios trabajos importantes ya realizados.
Según explican desde el estudio español, el arquitecto marroquí Nawfal Bakhat, hace ya tres años, se puso en contacto con el Estudio Lamela, una de las firmas de arquitectura más reconocidas de España, creadora de obras tan destacadas como la remodelación del Estadio Santiago Bernabéu, el Estadio de Son Moix de Mallorca, la Terminal T4 del Aeropuerto de Madrid o diversos edificios de Madrid y otras ciudades, así como recintos feriales.
En este primer contacto, Nawfal Bakhat les pidió formalizar un gran acuerdo para concurrir a la oferta de diseño del Nuevo Gran Estadio de Tetuán. El Estudio Lamela, con muchos años de experiencia, aceptó la propuesta y acordaron ambas partes ir al 50% en caso de que su proyecto fuera el ganador. Sin embargo, después de que los arquitectos españoles lancen su idea, no tuvieron respuesta. Cuando creían que el proyecto se había desechado, denuncian que Bakhat se lo 'robó' y se apropió de forma unilateral de la idea común.
La sorpresa de este estudio de arquitectos españoles fue cuando vieron en los medios de comunicación que el proyecto que ellos habían diseñado no solo había participado en el concurso sino que lo había ganado. Ellos no habían sido notificados. Al contrario. Nawfal Bakhat se hacía pasar por el único autor del proyecto, incluso en la misma presentación del diseño, al que acudió Mohamed VI, rey de Marruecos. Allí, este joven arquitecto se fotografió con el jefe de estado del vecino país, siendo éste ajeno a toda la polémica.
Reuniones con ministro y embajador
Desde entonces, el Estudio Lamela, a través de su CEO Carlos Lamela, comienza un litigio con varias reuniones con colegios de arquitectos de Marruecos, pero también con reuniones, a principios de este año 2019, con altas instancias como el embajador de España en Marruecos, Ricardo Díez-Hochleitner Rodríguez, o el ministro de Urbanismo de Marruecos, Abdelahad El Fassi Fihri. A Lamela le mandaron primero al Colegio de Arquitectos de Tánger, pero allí le dijeron que era competencia del Colegio de Tetuán, que le volvieron a mandar a Tánger. Todos se quitaban el problema encima. Al final se delegó en el presidente del Colegio de Arquitectos de Marruecos, con el que Lamela se reunió, y del que no supieron más, ya que tras una primera reunión no volvió a contestar a llamadas ni email.
"Nos encontramos descolocados", dicen desde el Estudio Lamela, que, cansados del 'engaño' que llevan sufriendo años, consideran una humillación lo que están viviendo. Lo que sí harán seguro es poner en conocimiento de la FIFA (principal órgano del fútbol) este problema, como se trabaja en el vecino y país y como se utiliza el conocimiento ajena para apropiárselo de forma unilateral. Esto es de vital importancia porque Marruecos está en un momento en el quiere 'seducir' al fútbol mundial, con varias candidaturas para albergar grandes eventos futbolísticos, de los que este estadio de Tetuán formaría parte.
Desde el estudio español, que facilitan todo tipo de correos electrónicos con conversaciones con Nawfal Bakhat, han perdido ya la paciencia de resolver el conflicto de la manera más amistosa posible. Hace 10 días recibieron un mensaje en el que se les aseguraba que habría una solución, pero volvió a ser un engaño. Siguen sin saber nada. Es por ello que irán a partir de ahora por la vía legal y se ha puesto en conocimiento del Colegio de Arquitectos de España.
"Es muy grave lo que ha hecho", dicen sobre Nawfal Bakhat. "Ha engañado al Rey de Marruecos, es una presentación fraudulenta", añaden en conversación con este periódico. Además, reconocen que el arquitecto marroquí les ofreció 8.000 euros en concepto de "colaboración". "Es ofensivo", dicen desde Estudio Lamela, que se sienten ninguneados por este 'robo' de sus méritos. "Está reconociendo que nosotros tenemos razón, pero intentan pagarlo con una cantidad ofensiva", aseguran. El litigio sigue y va para largo.
Manuel,es lo que les inculcó España cuando los invadió
Jajaja, es que los Españoles peninsulares no saben cómo se las gastan los marroquíes, nosotros los ceutíes ya les conocemos, no son de fiar, si no te engañan, te mienten, te manipulan, y siempre están alerta a ver como llevarte a huerto, son así por naturaleza, todos los EMPRESARIOS que han invertido en Marruecos han salido con una mano de tras y otra delante, es decir con el culo al aire
Sólo faltaba construir un estadio, el circo ha de seguir.