Las fuerzas de seguridad marroquíes han arrestado en la frontera que separa el reino alauí de Ceuta a un ciudadano marroquí que viajaba en un vehículo acompañado por su esposa y su hijo pequeño. Los efectivos descubrieron este viernes por la noche que el individuo circulaba con 10 kilos hachís a bordo, según informa presstetouan.com.
El hombre fue detenido por tratar de introducir la droga en la ciudad autónoma oculta cuidadosamente debajo de la silla de viaje del niño, la cual se coloca en los asientos traseros del automóvil.
Los funcionarios de aduanas sometieron al automóvil del sospechoso y residente en Ceuta a una inspección exhaustiva donde descubrieron la sustancia estupefaciente, preparada en placas, dentro del automóvil de numeración española.
Otros medios de comunicación digitales apuntan a que también habría una bolsa que portaba parte de la sustancia estupefaciente. Las fotografías difundidas en la prensa marroquí muestran cómo los efectivos de seguridad desmontaron parte del vehículo en busca de dobles fondos.
El detenido, que fue trasladado al Cuartel General de Seguridad de Tetuán junto a su esposa para ser interrogada sobre este intento de tráfico de drogas en el que se vio involucrada, supuestamente colocó las placas de hachís dentro de la silla de su pequeño hijo para camuflar el alijo ante los efectivos de Bab Sebta y el Tarajal.
La autoridad competente ha abierto una investigación para esclarecer los hechos que rodean al pase frustrado de estos 10 kilos de hachís escondidos en la silla de viajes del niño. El alijo, de haber cruzado con éxito, alcanzaría en el mercado un valor de varios miles de euros.
Mientras tanto, el acusado fue entregado a la Policía Judicial del Departamento de Seguridad de Tetuán para profundizar en las vinculaciones que esta intervención pueda tener con el tráfico de drogas entre Marruecos y España con la frontera terrestre como escenario.