Yo creo que sería una hora temprana cuando tuve un sueño revelador. Y lo digo por el largo tiempo que estuve cogido.
Fueron varios los protagonistas. “Si hijo mío, la paciencia es una virtud muy bonita que las personas de hoy la habéis perdido. Por eso te suplico que tengas más paciencia y busques las soluciones con tus rezos y súplicas. Nosotros estamos aquí junto a ti para eso. Para ayudarte. No creas que darle muchas vueltas a una cosa puede darte la solución más rápido. Sólo puede darte dolor de cabeza. No abuses de los analgésicos. Para el futuro te podrá venir mal. La vida es muy sencilla. Es adaptarse al rol que tienes asignado. Recuerda lo que te dije cuando estabas en la playa. Te metiste en calzoncillos estuviste nadando y vistes en el fondo como una piedra brillante. Te zambulliste para coger eso. Fue la curiosidad la que indujo a hacerlo. Y era una simple piedra blanca. Sin embargo recibiste una lección aquel día. Te dije que dentro del mar cualquier cosa gracias a la luz adquiere un brillo especial. Y no por eso hay que menospreciar lo hallado. Cogiste la mencionada piedra y la guardaste en la caja fuerte. No sé la utilidad que le puedes dar. Pero la enseñanza está en observar. Ver y valorar si merece la pena zambullirse a por aquello que has visto. La lámina hay que interpretarla. Se trata de un país donde las olas se crían con facilidad. Luego no es en España. Tampoco aquí hay muchas personas de color negra. Si piensas en el Estrecho de Gibraltar tampoco es muy probable que se puedan producir actos como los pintados. Luego la conclusión buena la dio hace muchos años el hermanito Sebastián cuando le hizo pintar a otro hermano Juan una revelación del futuro. Que tendrá dentro de breves días la acción de producirse está catástrofe. Producida por un terremoto y un posterior maremoto. Será en una isla del Caribe. Puedes publicarlo tranquilamente. Ya te lo he dicho yo. Luego puedes estar tranquilo que sucederá. Será en Haití. Puede servir como ayuda para evitar muchas muertes”.
Tras esta charla protagonizada por mi bisabuelo y dos hermanitos: Sebastián y Juan, pude escribir y presentar al mundo una nueva lámina de mi pariente Paco. Ya no podía estar asustado por las consecuencias. Se hizo a la luz el día de Reyes es decir el 6 de enero de 1980 y seis días después el día 12 de enero hubo un fuerte terremoto de 7.0 de magnitud con un montón de réplicas. Tuvo su epicentro a 10 kilómetros de la costa y se movió toda la zona incluido en Jamaica. La consecuencia fue casi 400 mil personas muertas y un tsunami posterior que gracias a las autoridades tan sólo hubo que lamentar la muerte de 4 personas pero hubo muchos desaparecidos. Gracias a nuestros hermanitos pudimos dar una noticia en exclusiva en los diarios de Alicante que se corrió como la espuma por todo el mundo cuando hubo la citada desgracia a la semana de su publicación. Me dio una buena enseñanza y procuré desde entonces estar mucho más receptivo y perder el miedo a las comunicaciones con los hermanitos.