Desde que la Consejería de Gobernación diera orden de iniciar la recogida de vehículos abandonados, a tenor del repunte que ha vivido nuestra ciudad en las últimas semanas, el área que dirige José Antonio Rodríguez ha levantado un total de 540 actas. El pasado lunes Gobernación constataba que aún restaban por retirar 89 vehículos, cuyo número se redujo hasta los 50 en la tarde de ayer martes. “Esto no quiere decir que estos 540 no se hayan retirado al 100%, seguramente se han retirado más y se hayan ido depositando otros”, apuntaba la portavoz del Ejecutivo autonómico, Yolanda Bel, en alusión a uno de los asuntos que ayer abordó el Consejo de Gobierno.
La Consejería de Gobernación dispone de un catálogo pormenorizado en el que “va contando o descontando en función de la retirada de vehículos”, apunta Bel. Un listado que ha sido determinante para conocer el “considerable” repunte de vehículos de nuestra ciudad desde el pasado 15 de junio, del que la Policía Local informaba puntualmente a Gobernación. “Este incremento había que acompañarlo de medidas para que no convirtieran Ceuta en un cementerio de vehículos abandonados”, apunta Bel.
La gravedad del problema varía en función de las zonas, “algunas más afectadas que otras”, agrega Bel, asegurando que “están localizadas y van a contar con una vigilancia diaria y cercana de la Policía Local”.
En algunos casos en los que los vehículos no presentan ningún tipo de identificación, tales como matrícula u otras características exigidas por la normativa manejada desde el área de Gobernación, los coches se trasladan directamente a la planta de descontaminación de vehículos de Benzú. “Esto será en el caso de coches que no puedan ser identificados”, explica.
La retirada de los vehículos abandonados, que se lleva a cabo a través de la colaboración entre la Consejería de Gobernación, el Parque Móvil y Amgevicesa, seguirá siendo un objetivo a cumplir, según apunta la portavoz del Gobierno. “Se va a hacer una vigilancia pertinente”, concluye.
El problema de los vehículos abandonados en nuestra ciudad viene ya de antiguo y es en la zona del Tarajal donde se ha registrado un repunte motivado por la OPE, según apuntaban fuentes policiales. En las cercanías de la frontera y en la playa de la Almadraba se han encontrado varios coches oxidados e incluso quemados.
La Ciudad dio de plazo hasta ayer martes para concluir la retirada de los vehículos, actuación que no ha podido ser ejecutada en base a los datos ofrecidos por la portavoz del Gobierno.