Alrededor de 3.500 mujeres y 200 menores de edad trabajan en un día cualquiera en el pequeño contrabando en el paso fronterizo marroquí con Ceuta, según un informe encargado por la Cámara de Representantes de Marruecos.
El informe, redactado por una misión parlamentaria de reconocimiento sobre la situación de esas dos categorías sociales en el paso fronterizo, fue debatido este martes en la sede del Legislativo en presencia de algunos ministerios vinculados con el problema.
La misión parlamentaria visitó el puesto fronterizo en varias ocasiones entre julio y noviembre de 2018, y sacó como conclusión que 3.500 mujeres es la cifra habitual en un día de porteo, que suelen ser de lunes a jueves.
Los diputados denunciaron sobre todo las condiciones "inhumanas" de las porteadoras marroquíes que entran en Ceuta para cargar a sus espaldas mercancías en fardos cuyo peso supera el suyo propio.
Además, el comité denunció el deterioro de la gestión del paso fronterizo por parte de los servicios aduaneros y de seguridad, y propuso medidas provisionales para humanizarla y otras estrategias para acabar definitivamente con el contrabando.
El ministro de Sanidad, Anas Dukali, explicó durante la reunión de este martes que en 2018 los servicios de su cartera realizaron intervenciones para atender 84 casos de porteadoras que sufrieron complicaciones de salud (que no precisó) durante su trabajo, y que dos de ellas murieron posteriormente.
Se trata del caso de dos mujeres marroquíes que perdieron la vida el 15 de enero de 2018 a consecuencia de una avalancha registrada en el lado marroquí de la frontera con Ceuta.
La comisión recomendó que se destine al puesto fronterizo más personal entrenado en el respeto de los derechos humanos y dotado de equipos tecnológicos desarrollados para garantizar la fluidez de los usuarios.
Asimismo, propuso la realización de un estudio socioeconómico sobre el nivel de formación y las necesidades laborales de las categorías sociales que ejercen contrabando en el paso para proporcionarles las alternativas adecuadas.
Sugirió, además, el establecimiento de una zona industrial en la región para emplear a las porteadoras, que en su mayoría trabajan para grandes contrabandistas a cambio de una remuneración diaria de entre 100 y 200 dirhams (9-19 euros).
Ese estudio un FRAUDE, que no incluye a los miles de hombres que martes y jueves portean, ni a los miles de marroquíes que portean por las tardes y fines de semana, permitido por aduaneros previó pago en mercancía, ni que en el porteo participan policías y aduaneros con sus propias flotas de vehículos.Se les debería de caer la cara de VERGÜENZA. Preocupense de darles trabajo y futuro a sus ciudadanos. INEPTOS.
No hay otra alternativa, sólo son portadoras, les queda poco, es la supervivencia, podían tener mejor vida.
y por desgracia tambien muchas familias de ceuta viven de esto ah y los marrokinos casados con las ceuties osea los risidinsia