La agresión sufrida por el personal del 061 debe ser condenada por toda la sociedad. Esos profesionales están para atendernos en momentos delicados de nuestras vidas, son gente sencilla, apreciada por muchos ciudadanos y que se han enfrentado a servicios muy complicados. No es de recibo que acudan a un domicilio para atender una urgencia y todo termine como lo hizo: con los cuatro lesionados. Es dañino físicamente pero humillante en lo psicológico. Aquí se ha valorado solo las lesiones físicas que pueden presentar los cuatro, pero igual o más importante es el golpe emocional que sufrieron al verse tratados y vejados de esta manera.
La repulsa, la condena debe ser total. Lo debe ser contra todo tipo de violencia hacia unos profesionales que ejercen un servicio público de protección y ayuda al ciudadano. Pero la sociedad desvaría, existe una parte cada vez más degenerada que no encuentra otro debate más allá de la violencia: que golpea, que dispara, que insulta, que amenaza. Educación y reacción inmediata son los ingredientes de una fórmula que debe terminar con esta lacra.
Los de Vox se crecen y aprovechan situaciones para soltar la primera barbaridad ocurrida
Pero en las condenas no todo vale. No valen los desvaríos al estilo Vox, como el que puso de manifiesto el coordinador en Ceuta, Carlos Verdejo. Pide personal de seguridad “que sea menos dialogante y más ejecutor” para “eliminar toda amenaza”. Vox quiere responder con más chulería al que se pone chulo, volver al ojo por ojo, diente por diente y propone buscar perfiles adecuados para el personal de seguridad. Un auténtico desvarío, un mensaje con carga violenta, una propuesta que ni viene a cuento y sobre la que ya deberían haberse pronunciado las empresas de seguridad. Vox busca el aplauso fácil, explotar el mensaje que considera le va a ir bien aprovechando momentos como las agresiones al 061 para soltar este tipo de parrafadas sin sentido, impropias de una sociedad que precisamente debe luchar contra la violencia de manera inteligente no proponiendo la colocación de los esbirros que quiera elegir y seleccionar Vox para ser “menos dialogante y más ejecutor”. Confunden todo hasta niveles de ridículo que demuestran la respuesta que son capaces de dar ante situaciones que requieren de mayor talla: esto no es una pelea de pandilleros de barrio, es algo más grave señores.
Vox tiene razón. La que desvaría es ud. Con el falso buenísimo no se consigue nada. La repulsa mediante la salida a la puerta es ridícula.