La Policía Nacional mantiene abierta una investigación para esclarecer lo ocurrido en la tarde de ayer en la barriada del Príncipe, cuando en torno a las 17.45 horas se produjo un tiroteo que llevó a que una unidad de la UPR que se encontraba en la zona para intervenir fuera alcanzada por un disparo. En un primer momento los agentes pidieron el auxilio de otros policías, acudiendo hasta la barriada componentes de la UIR, retirándose del lugar.
Horas más tarde y tras el análisis en la Jefatura Superior de la furgoneta alcanzada por el disparo, se comisionó a componentes de distintas unidades para llevar a cabo una operación en la barriada, con su oportuno despliegue en la zona. Fueron citados agentes del equipo cinológico con un can especializado en la detección de explosivos y droga además de miembros TEDAX para localización de armamento. Se contó con respaldo de la UIP, de agentes de la UPR y del Subgrupo de Noche. La labor investigadora sobre el terreno contó con el blindaje externo aportado por la UIR de la Policía Local y zetas de este Cuerpo que impidieron el acceso de vehículos y personas al lugar, para dejar así trabajar sin problemas a los efectivos del CNP.
El recorrido bajo control fue desde la zona del grifo hasta los alrededores en donde se han construido dos nuevos campos deportivos. En todos los recovecos se estuvo buscando armamento, tanto en los alrededores como dentro de puntos de reunión. En la noche de ayer no había trascendido que se hubieran practicado detenciones.
Fuentes policiales consultadas por este periódico sí indican que se cuenta con datos que apuntan a la identificación de las personas que habrían protagonizado este nuevo episodio con empleo de varias armas de por medio.
La Policía desplegó a varias unidades durante toda la tarde de ayer
Y es que este es el último de una hilera de sucesos que han generado un repunte delincuencial. Todos están bajo investigación y son de gravedad. Desde disparos a agentes del CNP con empleo de una AK 47 hasta heridos de bala que no se han saldado con detenciones de los implicados. También se recuerda entre los últimos sucesos el coche que fue acribillado el pasado 13 de junio en la barriada del Príncipe o los disparos que dañaron esta misma semana la mezquita de Muley El Mehdi a modo de advertencia a una persona que se encontraba en su interior.
El empleo de armas de fuego y su tenencia es una realidad apabullante. A pesar de las operaciones puestas en marchas no se ha podido localizar el armamento que se está usando para todos estos episodios delictivos en los que, de nuevo, vuelve a estar afectado el CNP. La operación puesta en marcha en la tarde de ayer sigue abierta, se ha enfocado una línea de investigación que está directamente vinculada con otras que los agentes tenían abiertas al haber coincidencias entre varios detalles de sucesos aparentemente distintos.