El pasado miércoles 19 de junio, el Tribunal de Tánger condenó a la persona conocida como el Pablo Escobar de Marruecos a cuatro meses de prisión por falso testimonio y tráfico de drogas.
El condenado fue arrestado después de crear un gran revuelo en los medios de comunicación marroquíes y españoles tras aparecer en un vídeo de un programa del canal de televisión español 'Cuatro', afirmando que era un gran traficante de drogas y de que fuera apodado el Pablo Escobar de Marruecos. Además, declaró durante el programa que se encargaba de distribuir lo que se llama karkubi en todo el país tras ser contrabandeado desde España.
Las autoridades comenzaron una investigación después de ver el vídeo y lograron encontrar la identidad de la persona que apareció disfrazada. Después de las pesquisas, se descubrió que en realidad era un guardacoches.
Tras acordar el pago de una pequeña cantidad a cambio de desempeñar el papel del Pablo Escobar de Marruecos, el primer distribuidor de karkubi en Marruecos, fue entrevistado por los dos periodistas de 'Cuatro', ideólogos de esta historia, con fines sensacionalistas. Pero lo que solo lograron fue mostrar falta de profesionalidad al cometer estos actos.
La dificultad de llegar hasta un capo de la droga
El presentador del programa de la cadena española con el que se hizo pasar por narcotraficante marroquí, se rodó en un lugar abandonado cerca del cementerio Mujahideen en Tánger para realizar la grabación con él sin mostrar sus rasgos por temor a ser arrestado.
Expertos en analizar el funcionamiento de las redes de tráfico y distribución de drogas en Marruecos ya descartaron en su día que la persona que apareció en el programa del canal Cuatro y con el que se dialogó fuera un capo del narcotráfico, destacando que el acceso a los verdaderos barones no es algo fácil.