El periodista ceutí Salomón Hachuel será uno de los 23 distinguidos el próximo 30 de mayo con la Medalla ciudad de Sevilla. Una condecoración que entrega anualmente el ayuntamiento de la capital hispalense, con motivo de la festividad de San Fernando, a diferentes personas o instituciones vinculadas con la ciudad que hayan destacado por la labor que desempeñan.
Hachuel, que ha trabajado de forma incesante y continuada en Radio Sevilla desde 1994, ha sido reconocido “por el trabajo profesional constante y mantenido en el tiempo al frente de un espacio de radio abierto y plural, por el perfil solidario y siempre dispuesto, y por su contribución a la construcción de una imagen de ciudad moderna y participativa”.
Una noticia que, aún a día de hoy casi una semana después, abruma al caballa. Confiesa que continúa “en digestión” y que está “impactado”. Como suele ser normal nadie espera que le premien con tal distinción, como reconoce. Un sentimiento habitual, pero en su caso, además, llega con una doble connotación, la social, de la que, quizá, se pueda sentir todavía más orgulloso. Hace treinta años emprendió un proyecto junto a Paco García, la ‘Operación Buena Gente’. “Estábamos solos”, recuerda, y a día de hoy se ha convertido en una macrocampaña social que sucumbe a toda Sevilla a lo largo del mes de diciembre.
La intención de estos por entonces jóvenes no era otra que recoger juguetes y alimentos no perecederos para los niños y familias más desamparadas ante la llegada de tan señaladas fechas. El Banco de Alimentos todavía no era ni un proyecto y esta andanza juvenil muy pronto caló entre la sociedad hispalense hasta alcanzar las dimensiones de las que ahora puede presumir, llegando a recoger durante la última campaña más de 8.000 juguetes.
Agradecido
Sin duda, esta iniciativa es de la que Hachuel se siente a gusto y se lanza a conversar con orgullo, omitiendo con modestia esa labrada carrera profesional en la que se ha ganado el profundo cariño de todos los oyentes que desde que fueron conocedores de la noticia se han cifrado en cientos para manifestarle su cariño. Pero el aspecto social llega más hondo. Quizá porque arrastra un arraigo personal, familiar. Sin duda son sus padres los primeros que nombra en esa lista de agradecimientos, donde la Junta de Portavoces y, por supuesto, sus oyentes también son dignos de mención. “Sin olvidar que Sevilla me ha dado una familia. Una mujer y dos hijos maravillosos”, dice con orgullo.
“Pero este proyecto cobra sentido cuando echo la vista atrás y analizo el ambiente en el que me he criado. Mi padre ha sido una persona al que le he visto haciendo favores durante toda su vida y mi madre es la persona más bondadosa que existe. Sin duda, el ponerme a buscar juguetes por toda Sevilla no es casual, son cosas que se maman”.
Este reconocimiento se traduce en “una enorme gratitud”. Pero “¿y ahora?”. A seguir, dice. No lo ve más allá que un ‘empujoncito’ para continuar con su trayectoria, “porque si mi compromiso con esta ciudad siempre ha sido enorme, ahora es infinito”.
Otro vocero del partido.