Tal y como estaba previsto, ayer tuvo lugar el paro anunciado por los sindicatos en protesta por las medidas de recorte salarial introducidas por el ejecutivo presidido por Rodríguez Zapatero. Como es lógico en todos estos casos las diferencias entre Administración y centrales sindicales en relación con los participantes marcan la diferencia y la noticia de la jornada. Mientras que para las administraciones en general, tanto la central como la autonómica el seguimiento ha sido mínimo y nada más que ha superado el once por ciento, los sindicatos lo califican de éxito. Sin embargo, se han producido distintas circunstancias que deben ser denunciadas, como el retraso que se produjo ayer en las comunicaciones marítimas con Algeciras porque un piquete de trabajadores interrumpió el normal desenvolvimiento de las operaciones portuarias. Los huelguistas deben comprender que su derecho a no trabajar llega hasta donde comienza el derecho de los demás a poder desplazarse libremente. Medidas de ese calibre, al final, lo que provocan son el rechazo por parte de la ciudadanía.