J.M.M. relata el riesgo que supone sufrir un accidente de coche y el coste económico de la atención en el reino alauí.
Aunque hoy será evacuado a la península, un malagueño hospitalizado en la ciudad desde hace ocho días nunca olvidará las vicisitudes a las que se ha enfrentado después de que sufriera un accidente de tráfico en Mohammedia, a 17 kilómetros de Casablanca, Marruecos, donde trabaja.
Después de estar ingresado en un hospital público, “donde no le hicieron nada”, añade el español, fue transportado a una clínica privada en este mismo municipio. “Nos cobraron unos 900 euros por dos días. Le hicieron una radiografía que, una vez analizada por los médicos de Ceuta, no podían ver nada”, explica su esposa.
A las lesiones diagnosticadas por los facultativos marroquíes, se suma otras dos costillas fracturadas; una vértebra; un pulmón encharcado además de mayores daños sufridos por una de sus manos, de la cual será operada en la capital de la Costa del Sol. Ante la nula evolución detectada por los familiares del malagueño, su propio hijo se dirigió a la Embajada de España en Rabat para solicitar apoyo diplomático para ser trasladado en ambulancia a Ceuta.
“Comunicaron que antes existía una partida para estas emergencias, pero ahora se han cancelado”, indicó J.M.M., su esposa. Finalmente, alquilaron una ambulancia “destrozada” por 1.400 euros para llegar a la ciudad. Agradece la atención del Ingesa y denunciará a la empresa que le aquiló el coche accidentado.