Un agente de la Policía Local que estaba fuera de servicio encontró ayer 10 kilos de hachís que estaban dentro de una bolsa de deportes.
El hallazgo se produjo cuando el efectivo de la corporación local estaba practicando deporte cerca del Foso y divisó una bolsa sospechosa en los huecos de los espigones. Una vez con la bolsa en sus manos, se comprobó que en su interior se escondía la droga.
Tras el hallazgo se llevó la bolsa al área de Sanidad, en donde se procedió al análisis y pesaje. Eran diez kilos de hachís, los cuales han quedado intervenidos. El hallazgo casual no permite conocer el dueño de la mercancía, pero se sospecha que se dejó en el lugar para una carga que se iba a llevar a cabo.
Uno tiene que ser prudente en todo lo que encuentra cosas sospechas