La Ciudad Autónoma remitió hace dos semanas una nota a la Delegación del Gobierno en la que ruega a Salvadora Mateos que dé orden a la Guardia Civil para que prohiba el tráfico de chatarra a Marruecos por la frontera. El Gobierno local entiende que, mientras que permitan su tránsito a Marruecos, se continuarán trayendo a Ceuta los coches inservibles para su desguace en la ciudad y los restos seguirán apareciendo esparcidos en lugares como el vertedero ilegal entre el acceso a la ITV y el vial de la calle Este.
Al parecer, el Gobierno de la plaza de los Reyes ha recogido el guante y están organizándolo para impedir que la chatarra entre al otro lado porque, como deduce el Ejecutivo autonómico, la situación se perpetuará mientras que no se corte este tipo de negocio.
Los vehículos nacionales de Ceuta, propiedad de personas con trabajo o familia en Marruecos que acuden con frecuencia al país vecino y que quieren acceder al reino alauí, tienen que renovar la documentación cada seis meses, tal y como requieren sus autoridades. Cuando esos coches están en unas condiciones que imposibilitan esa renovación, sus propietarios los dejan en la ciudad y los desguazan aquí.
Producto de ese desmontaje, son las piezas que pasan a Marruecos porque tienen salida comercial y pueden ser vendidas allí. Mientras que el cascarón resultante queda abandonado en cualquier lugar. Cada día aparecen más vehículos quemados intencionadamente en finca Buzzian, en Arcos Quebrados, y junto al colegio ‘Reina Sofía’, en el Príncipe.
La Consejería de Medio Ambiente retiró ayer los cuatro coches calcinados que, desde hace una semana, convertían el aparcamiento enfrente del centro educativo más en una zona de guerra que en una barriada de una ciudad europea.
Tragsa trasladó estos vehículos quemados hasta uno de los dos centros de tratamiento contratados por la Ciudad, sin embargo, los vecinos se muestran insatisfechos con la lucha que las autoridades mantienen contra quienes incumplen las ordenanzas.
En Arcos Quebrados, el presidente de la Asociación de Vecinos del Príncipe Alfonso, Abdelkamil Mohamed ‘Kamal’, sugirió que la Ciudad debería poner vigilancia contra el vertido de cascarones en Finca Buzzian –y también escombros– que proceden de desguaces ilegales en otros puntos de la ciudad.
La Asociación de Vecinos del Príncipe Alfonso condenó rotundamente la quema intencionada de vehículos y pidió la colaboración de la barriada para que denuncien estos actos incívicos.
Kamal hizo un llamamiento a los vecinos para que colaboren con las fuerzas de seguridad y llamen al 112 cuando vean que arrojan restos de coches porque es “fundamental”. Una cooperación que sirva también para evitar los apedreamientos que se producen.
“Estamos viendo que los bomberos son continuamente apedreados y esperemos que no haya un incendio dentro de la barriada porque este tipo de actos lo que están consiguiendo es que Bomberos no entre a la barriada si no está acompañado del Cuerpo Nacional de Policía. Puede ocurrir una desgracia y que no puedan acceder cuando se les necesite de verdad”, advirtió Kamal.
¿Para cuándo cámaras de vigilancia desde el hospital, donde se controlaría perfectamente toda esta zona?
La mayoria son coches robados y detras de cada coche quemado hay una historia triste. Primero localizan el coche con matricula extranjera luego empiezan a robar piezas poco a poco y si no aparece nadie pues siguen hasta dejar solo la carcasa y al final la queman para quitar huellas....