El padre de la joven asesinada en el mes de julio de 2009 por su pareja, Ikram Chaib, mantiene su teoría sobre un asesinato premeditado y con colaboración apoyado por
las declaraciones de personas del entorno de la pareja y por algunas pruebas que él ha podido ir recabando en su afán por aclarar todo lo sucedido el día que su hija perdió la vida. Abdelmalik Chaib, progenitor de la joven de 23 años, ha visto reforzadas sus sospechas con la aparición en casa de su hija de unas fotos y unas grabaciones realizadas a finales del mes de abril de 2009 durante un viaje por Marruecos que ambos realizaron acompañados por unos amigos. En una de esas imágenes se puede ver a Marvin, presunto asesino confeso de la joven, agarrando del cuello a Ikram en una actitud jocosa, que quizá no lo fuera tanto según el padre de la chica. Él tiene muy presente que la mujer murió estrangulada, según la autopsia, y que pudo hacerlo a manos de su pareja, quien confesó el crimen. Adelmalik mantiene que, aunque no se lo comunicaron oficialmente, su hija podría tener un golpe de un hacha en la parte trasera de la cabeza, lo que para él explicaría la enorme cantidad de sangre encontrada en el baño en el que se halló el cuerpo.
Por otro lado, el hecho en sí de que Ikram fuera encontrada colgada en el baño supone, para el progenitor de la joven, una evidencia de que Marvin actuó acompañado. “Mi hija era una persona corpulenta y fuerte, tuvieron que actuar entre dos. De lo contrario no habrían podido con ella con tanta facilidad”, asegura. Esta teoría la apoya además el que en la casa se encontraron más de dos botellas de alcohol vacías y, desde su punto de vista, “él sólo no habría podido beber tanto. Además, a él le gustaba hablar, estar acompañado”. El padre de Ikram asegura que gente de la zona le ha confesado que el día de los hechos vieron por la zona el coche de un amigo de Marvin, un vehículo que aparecía comúnmente por la zona y que durante la mañana siguiente también pudo estar por el lugar según afirma el padre, quien se pregunta qué hacía allí ese coche el día de los hechos y si su dueño pudo participar en los hechos. En este sentido, Abdelmalik asegura que tuvo que haber dos personas: una que agarrara por detrás a Ikram y otra que la estrangulara. Mantiene esta afirmación basándose en que, en su opinión, Marvin no presentaba arañazos ni lesiones propias de que Ikram se defendiera y que su hija tampoco presentaba signos de haberse defendido. “Ikram era una chica fuerte. Si la hubieran querido atacar se habría defendido y alguna señal de ello habría”, explica el hombre. La teoría de que el asesinato de Ikram pudo ser perpetrado por más de una persona ya fue tenida en cuenta por la Policía en su momento, siendo una de las líneas en las que se ha investigado.
Abdelmalik Chaib asegura que seguirá recabando información e investigando hasta descubrir qué pasó exactamente. “Sólo quiero que la Policía investigue, que estas pruebas y evidencias no se queden sin mirar ahora que tienen tiempo porque luego realizarán el juicio y habrá cosas que no se han aclarado”, concluyó.