Después de leer el artículo firmado por D. Juan Carlos Rivas Requena y publicado en este medio informativo, el Real Club Náutico CAS quiere, aprovechando también la misma vía, hacerle llegar una serie de puntualizaciones. Si el Sr. Rivas conoce, tal como manifiesta en su artículo, que se incumple la legislación los días previos al concurso de pesca submarina por parejas que el CAS celebra por Navidad, debería de forma inexcusable, (su cargo como presidente de la F DASDC le obliga) denunciarlo ante las autoridades competentes en lugar de difamar y vender humo.
El campeonato ha contado con todas las autorizaciones necesarias (Capitanía Marítima, Ciudad Autónoma de Ceuta, Consejería de Medio Ambiente, etcétera) y se rige por el mismo reglamento por el que la FEDAS organiza el resto de competiciones de pesca submarina. Además el CAS, de forma voluntaria, aplica una serie de medidas restrictivas entre la que destaca la prohibición de pescar en los puntos más frecuentados por los buceadores con escafandra autónoma como son los Chiclones (L.I.C.s).
Resulta paradójico que critique el campeonato la misma persona que organiza las competiciones regionales de pesca submarina en la ciudad y que además representa en Ceuta a la FEDAS, que es la entidad que regula y organiza en España los campeonatos de pesca submarina a nivel nacional.
También es cuanto menos extraño que este mismo señor no tenga los mismos escrúpulos, que manifiesta en su artículo, cuando expide y cobra las licencias federativas a las personas que practican el deporte de pesca submarina.
Por otro lado, tampoco se entiende que demonice esta actividad precisamente la persona que encabeza la FEDAS en Ceuta ya que la pesca submarina constituye una de las actividades más importantes y con más prestigio dentro de la federación. Si este señor fuera consecuente con sus ideas, lo lógico es que antes de organizar los concursos regionales que ha organizado, hubiera presentado su dimisión como presidente de la FDASDC en Ceuta.
Por parte de la directiva del Real Club Náutico CAS se comprende que esta actividad, junto con el resto de las actividades que organiza el club, no le guste, al Sr. Rivas, pero nos preguntamos si en esta animadversión que siempre demuestra hacia nosotros no estará influenciada por la circunstancia de que su solicitud de alta como socio no fue aceptada, constituyendo este hecho un caso insólito en los más de 50 años de historia del club.