Arranca la II Edición del Máster en Dirección y Administración de Empresas Turísticas de la Universidad de Granada en Ceuta. Oficialmente acaba de ser aprobado por los órganos correspondientes de la Universidad el proyecto presentado por los profesores responsables del Departamento de Organización de Empresas en coordinación con la Fundación General UGR-Empresa. El documento oficial de preinscripción ya está disponible para todos los interesados, tanto en la Facultad de Educación y Humanidades de Ceuta, como en las oficinas de la Fundación. También se puede obtener on-line.
Hasta aquí, la escueta noticia que ya se ha difundido a la opinión pública. Pero me interesa resaltar también otros aspectos. El primero, referido a las razones que nos deben mover a formarnos de forma permanente. Está más que demostrado que las personas con mayor formación son las que más posibilidades tienen de obtener un trabajo de calidad. También que los países que más invierten en educación e investigación, son los que más crecen y progresan económicamente. Pero es que además la idea de la formación permanente a lo largo de toda la vida se remonta a los primeros textos conocidos en la historia de la humanidad. Libros como el Antiguo Testamento, el Corán, el Talmud y algunos otros ya reflejan la necesidad humana de aprender a lo largo de toda la vida. Y en el siglo XIX las más importantes iniciativas que surgieron, fundamentalmente en los países escandinavos, a favor de la formación de adultos, iban más allá del puro interés laboral. La principal justificación era cultural, social y política, pues el acceso al conocimiento se consideraba como la única forma de que las personas consiguieran tomar el destino en sus propias manos. Hablamos de la “emancipación social y cultural”.
También hay otras razones de orden práctico relacionadas con la situación actual de crisis económica. Al mal tiempo buena cara. Es lo que nos enseña el refranero popular. No es que tengamos que conformarnos con lo que nos ha tocado vivir. Hay que luchar. Lo que ocurre es que una de las mejores formas es aprovechar el momento para seguir ampliando nuestra formación. Con ello conseguiremos no perder el tiempo, lo primero, y situarnos en los mejores puestos de salida en el momento en que empecemos a superar nuestros problemas, lo segundo. Porque de la crisis saldremos, antes o después. Lo que sería triste es no saber ver que también la crisis puede ser una oportunidad para replantearnos nuestro futuro. Y un máster universitario es una buena opción de formación, aunque no sea la única.
En el ámbito más doméstico, es evidente que el sector turístico sigue siendo una de las pocas alternativas de desarrollo económico que nos quedan. De esto ya se ha hablado en otras ocasiones y se han dado cifras respecto al importante porcentaje del PIB que representa el mismo a nivel internacional. También de los nuevos nichos de mercado que se presentan en el turismo de la mano de las nuevas tecnologías y de la sostenibilidad. Ceuta no puede ser una excepción. También aquí hay margen para desarrollar un turismo atractivo y respetuoso con el entorno, el medio ambiente y la tradición histórica. Para ello, además de la necesaria implicación de todos los sectores y organismos que tengan algún interés en el mismo, es imprescindible la formación a distintos niveles.
La Universidad de Granada ha apostado claramente por poner en marcha iniciativas formativas de alto nivel en el sector turístico. Una de ellas es la que se ofrece en Ceuta, a través de la II Edición de este Máster, que cuenta además con la importante mención de Excelencia educativa de la Organización Mundial del Turismo. Su puesta en marcha ha sido posible, una vez más, gracias a la aportación económica de la Ciudad Autónoma de Ceuta. Pero también por parte del profesorado del Máster se va a hacer un esfuerzo importante renunciando voluntariamente a parte de sus honorarios, para así cubrir la rebaja que la subvención de la Ciudad Autónoma ha sufrido. Esto, junto con las ayudas que vendrán de parte de algunas empresas locales, permitirá mantener el mismo precio de matrícula que en la primera edición, lo que contribuirán a aliviar el esfuerzo económico que van a hacer las familias cuyos miembros decidan realizar estos estudios.
La escritora sueca Derek Curtis Bok nos decía en 1930: “Si cree que la educación es cara, pruebe con la ignorancia”. Unos años más tarde Europa tuvo la desgracia de sufrir en sus carnes las terribles consecuencias del embrutecimiento de la población. Esperemos que haya sido la última vez.