No sé quién está realizando la asesoría de campaña a los socialistas pero, como todo en este nuevo socialismo, ya nada es como antes. Están dejando claro que ya no son lo que eran, y que no tienen intención de volver a serlo. Han pasado de ser los mejores manipuladores de la verdad, a presumir de sus errores.
El candidato Rubalcaba, quien fuera vicepresidente primero de España y por tanto co-responsable de la espeluznante dimensión de la crisis que asola España, anuncia que quiere pelea. Es decir, el máximo responsable del estado de crispación generalizada que existe en este país, echa más leña al fuego con estas declaraciones. Precisamente ahora, cuando más necesitamos la cohesión, serenidad y solidaridad de todos. Con este gesto se ha presentado ante la sociedad como un hombre no conveniente para el gobierno del Estado, generador de posibles conflictos sociales, e inadmisible interlocutor para llegar a pactos políticos que bien pudiesen convenir al futuro inmediato de España. Aunque todo esto es algo que ya sabíamos y habíamos constatado aquellos que conocíamos su biografía política, que a modo de resumen va, desde ser portavoz del Gobierno del caso GAL, a ministro de interior del caso Faisán, pasando por ser directo responsable de 5 millones de parados, más de un millón de familias sin ningún recurso, un 25% de pobreza infantil bajo su gobierno, y los mayores recortes sociales de toda la historia de la democracia.
Otro acto de petulancia que la olvidadiza progresía ha cometido estos días, ha sido la presentación de un vídeo en el que, sin ningún pudor, utilizan a un niño de una forma vil y anacrónica, intentando promover la lucha de clases, como si todos no supiésemos que los viejos y nuevos ricos engrosan preferiblemente las filas socialistas, y que no existe político más amigo de la riqueza y la “jet set” que un socialista. Si no, que se lo pregunten a Bono, Blanco, las ministras portadas del Vogue, los aviones para ir a comprar a Londres o el gusto por ir a cantar ópera en París… Para colmo y escarnio público, esta presentación la hacen el mismo día que se hace público el salario de la actual ministra de sanidad, Leire Pajín, nada más y nada menos que 28.710 euros al mes, que es algo así como el presupuesto anual de toda una familia media en España.
Los hechos producidos por el nefasto gobierno socialista son tan evidentes que es imposible ocultarlos, de ahí que deba ser bastante difícil realizar una campaña para los perdedores, pero nunca había visto tan nervioso al socialismo, ni siquiera en los estertores felipistas. Será porque verdaderamente el dueto Zapatero-Rubalcaba va a dejar al socialismo bastante malherido, tan es así que mucho me temo que deberá someterse a una refundación si es que quieren seguir defendiendo los valores de la progresía. A mi plin.