El informe ‘Cuentas de la Educación en España 2000-2013. Recursos, gastos y resultados’ que acaba de publicar la Fundación BBVA subraya en sus conclusiones generales que existen condicionantes personales de los alumnos “derivados en buena medida de su entorno socioeconómico” que “afectan a la eficiencia de la Educación”.
Ceuta es líder nacional en algunos de ellos como en el retraso en el inicio de la Educación Infantil, la repetición temprana de curso o el absentismo escolar (sobre todo en Primaria), así como “la condición de inmigrante”, rasgo en el que la ciudad tiene, sin embargo, el menor porcentaje de alumnado de toda España. “Entre los condicionantes familiares que influyen en los resultados sobresalen el nivel de estudios y el estatus ocupacional del padre y la madre y el entorno cultural del hogar”, señalan los autores, que destacan que “su significatividad indica que no basta con poder acceder a un determinado nivel de estudios o completarlo para igualar las oportunidades, pues otras circunstancias afectan a los niveles de competencias adquiridas y condicionarán las trayectorias laborales y sociales de los egresados”. El clima educativo de cada centro “condiciona positiva o negativamente el aprendizaje, reforzando los condicionantes del entorno familiar”.