Cree que hay “un cambio de mentalidad” y que debemos asumir que “España es diferente de la de hace 30 años”. Define a Podemos como “un instrumento de esperanza”.
La campaña electoral que está a punto de empezar y la situación política en nuestro país acaparó gran parte de la entrevista del pasado martes a Juan Luis Aróstegui. El diputado y portavoz de Caballas también explicó en el programa de la Cadena Cope y FaroTV el acuerdo de su formación con Podemos. Aróstegui se mostró esperanzado con la posibilidad de que el próximo 26 de junio pueda haber un cambio en el panorama político nacional.
–¿Cómo ve el papel de Podemos en la política nacional?
–Hay que entender que estamos ante un cambio de mentalidad. Esta es otra España diferente de la de hace 30 años. Esto hay que entenderlo y asumirlo. No lo digo en sentido negativo. Yo creo que es bueno. Todas las generaciones tienen que impregnar de su personalidad su época histórica. Estamos en un país que necesita un cambio en todos los sentidos. Se cambia el concepto de nación, de relaciones sociales, de democracia... Todo esto va evolucionando permanentemente y ahora está claro que hay un sentir generalizado de la parte más activa de la sociedad que dice ‘el camino está en otra parte’. Hay que cerrar lo que ya está caduco y empezar un camino nuevo con ilusión, con ganas. Este camino nuevo es Unidos Podemos, una idea diferente en todos los ámbitos de cómo hacer política y de cómo involucrar a las personas en la política. Y de cambiar radicalmente lo que ahora ya es rancio, cansino y, en muchos aspectos, repugnante porque no debemos obviar el tema de la corrupción. Muchas veces, cuando uno se acostumbra a las cosas, parece que forman parte del entorno y se asumen.
–Habla de Unidos Podemos, pero en Ceuta IU no ha dado su apoyo a Podemos. ¿Por qué cree que ha sido imposible ese acuerdo y ha resultado tan fácil con Caballas?
–No voy a opinar sobre eso porque tampoco me interesa mucho. No tengo muy claro qué hace IU ni qué deja de hacer. Cuando IU decidió apoyar al GIL, desconecté. Me pareció una cosa tan incongruente en sí misma que desconecté. No sé lo que hacen. No me interesa.
–En relación al ‘camino del cambio’, del que habla, en Ceuta falta mucho por recorrer teniendo en cuenta los resultados de los anteriores comicios.
–Falta, en España en general y en Ceuta en particular. La gente, vamos a decir sin que nadie se ofenda, decente dice, vamos a ver, en partido como el PP, que ya todo el mundo sabe que es la corrupción con patas ¿puede sacar siete millones de votos? ¿Esto como se explica? ¿Todos los españoles son unos sinvergüenzas? Yo creo que todavía pesa en nuestro país la dictatura y la Guerra Civil y todo el pasado. Creo que en el subconsciente de los españoles hay un poso de miedo, el concepto de súbdito, de reverencia al poder. Un conjunto de prejuicios que cuenta trabajo desmontar.
–¿Ésa también sería la explicación de lo que pasa en Andalucía con el fraude de los EREs?
–En Andalucía es otro fenómeno diferente. Coincide con los momentos de la historia y los partidos políticos que los rentabilizan. Andalucía era un erial. Y ahora Andalucía está transformada. Mucha gente, sobre todo en los pueblos, lo nota, lo ve y lo valora. Y lo valorará hasta que muera. Este es un voto, que no es que sea cautivo, es un voto de agradecimiento. Obedece a una realidad: el PSOE transformó Andalucía. En pueblos en los que no había ni asfalto, hoy tienen su centro cívico, su polideportivo... Eso es así y lleva marca PSOE, para bien o para mal. ¿Qué está pasando? Que esto, como todo en el tiempo, se va perdiendo. En las grandes ciudades, el PSOE ya no es lo que era. En las zonas más atrasadas, esto tiene mucho peso.
–¿Podrían haber surgido Podemos y Ciudadanos sin la crisis económica? ¿Y pueden llegar a desaparecer cuando se supere?
–No. Yo creo que existen detonantes; hechos históricos que hacen que fenómenos que están en el ambiente, de repente tomen forma. El cambio en España era algo que existía porque las nuevas generaciones no se identificaban con la forma de hacer política, con las instituciones. El ‘No nos representan’ del 15M definía con mucha claridad el problema que había antes. Pero como las cosas más o menos marchaban, no había necesidad de implicarse en algo. Efectivamente es una crisis económica la que marca el ahora.
–A veces Podemos hace algunas propuestas cuyas consecuencias da la sensación de que no han acabado de valorar, sobre todo en planteamientos económicos.
–Creo que esa es una crítica un tanto injusta que está basada en la dificultad de explicar las cosas. Podemos presentan un programa electoral con una Memoria en la que estas cosas están explicadas. Además, la gente que ha elaborado esto son economistas de una reputación indudable, aunque se esté o no de acuerdo con ellos. Entiendo que haya gente que no esté de acuerdo con las propuestas, pero no son descabelladas ni incumplibles.
–¿Cree que algún día veremos a Aróstegui con coleta o una cosa es Caballa y otra Podemos?
–Si yo estuviera en Madrid, yo sería de Podemos, sin la menor duda. Estoy aquí y soy de Caballas porque creo que las dos formaciones políticas comparten la esencia en cuanto a la forma de ver las cosas. Caballas existía y tenía su representación institucional antes de que existiera Podemos. Y Podemos es una fuerza política en construcción. No lo digo peyorativamente, lo digo en sentido positivo. Estamos hablando de la nueva política. Podemos es un instrumento de esperanza para que la gente rehaga el panorama político. Por eso en Podemos cabe todo el mundo y Podemos no tiene posiciones dogmáticas sobre nada en esto momentos. Es la ilusión de la gente detrás de un nombre. Podemos irá dando sus pasos y Caballas no va a ser nunca ajeno a esos pasos. Podemos en Ceuta será algo o no lo será en función de su evolución.
–¿Ve la posibilidad de un pacto con Podemos en 2019, en las próximas elecciones locales?
–Faltan tres años. Es mucho tiempo en política y más en una situación de incertidumbre. La evolución política de Ceuta y del conjunto del país va a depender mucho del próximo resultado electoral. No va a pasar lo mismo si gobierna otra vez el PP que si gobierna Unidos Podemos. Si gobierna Unidos Podemos, todo tendrá otro color. También en Ceuta va a afectar mucho el resultado de las elecciones generales.
Las elecciones locales de 2019 ahora mismo para nosotros son lejanas. Hay que esperar e ir viendo acontecimientos. Sí parece, es una cosa que yo daría como un hecho cierto, que el PP va a perder la mayoría absoluta.
–A eso me refería, a si dentro de tres años se va a poder hacer una suma que hasta hace un tiempo era impensable.
–De hecho, actualmente el PP tiene mayoría absoluta sólo por la Ley D’Hondt. En votos tiene el 44%, ya está por debajo del 50%. Tiene la mayoría absoluta por un puñado de votos y por la Ley D’Hondt, no por méritos propios. ¿Qué va a pasar? Que esto va a menos. Esta legislatura lo están haciendo muy mal.
–Hace unos días, entre usted y Mohamed Alí, no tuvieron piedad. No sé si fue usted el que dijo éste que había sido el peor año que recordaba de la historia política de Ceuta.
–Muy flojo en todos los sentidos. No tienen ni iniciativa ni capacidad de gestión ni empuje ni convicción ni ilusión.
–Vamos, que según usted se les ha juntado todo.
–Sí, es la impresión que tengo. Son los estertores del régimen. Estoy convencido de que van a perder la mayoría absoluta. Y vamos a ver qué queda en la otra parte. ¿Qué va a pasar con el PSOE? Tampoco lo sabemos. Caballas está ahí. Y va a estar ahí. Yo creo que estamos haciendo un trabajo muy interesante desde el punto de vista político. También es verdad que la ciudadanía valora las cosas a su modo.
–También Caballas tiene su problema en el ámbito político con la lucha con MDyC.
–Nosotros no nos planteamos la relación con ningún partido de la oposición en términos de lucha. Nosotros las ideas las tenemos claras, que no significa que sean acertadas. Digo claras. Nosotros tenemos un proyecto de ciudad, un programa político. Tenemos una idea de cómo gobernar la ciudad. Tenemos un rival, que es el Partido Popular. Nos dedicamos a trabajar para esto. El resto de fuerzas políticas, sean cuales fueren, no nos ocupan mucho tiempo ni mucho esfuerzo. No nos dedicamos a ello. Que hagan lo que les parezca y nosotros a nuestra tarea, que ya de por sí es titánica. Yo creo que nosotros hacemos una oposición muy seria y muy responsable. ¿Qué significa muy responsable? Nosotros no nos dedicamos a enredar. No queremos desprestigiar al PP por el mero hecho de desprestigiarlo. Nosotros tenemos, primero un proyecto y a partir de ahí, una crítica. Como las cosas que se hacen son diferentes de lo que nosotros creemos que es bueno para la ciudad, por eso les criticamos. No al revés, no criticamos por criticar y ya veremos después qué hacemos. Ahí están las pruebas en cualquiera de los aspectos que se quiera mirar: desde el punto de vista presupuestario, desde las ordenanzas, desde el Reglamento, desde la idea de las empresas municipales... De todo esto Caballas tiene una idea muy clara. Y en el conjunto, un proyecto de ciudad muy claro. Trabajamos para intentar consolidarlo, transmitirlo a la ciudadanía y, llegado el momento, gobernar.
¿Es difícil? Sí. La política en Ceuta está muy viciada. No hay mucho seguimiento. A la gente no le gusta o no participa mucho de la vida política. No se interesa por las cosas. Es todo muy superficial. La política es artificial, los argumentos son superficiales. Es la política del ‘Sálvame’, que es lo que parece que en Ceuta está más de moda. Esto es malo para un partido como Caballas, que lo que pide es justo lo contrario.
–Un problema de los partidos locales es la falta de proyección a nivel nacional. ¿Usará Caballas el acuerdo con Podemos para, por ejemplo, llevar cuestiones al Congreso de los Diputados?
–Es un poco al revés. Los partidos localistas surgen porque los partidos de implantación nacional no dan respuesta a los problemas de Ceuta.
En política, los espacios no se inventan. Los espacios políticos son la consecuencia de la dinámica social. ¿Por qué hay tantos partidos políticos localistas o tienen tanta representación en Ceuta y Melilla? Muy sencillo. Porque los partidos políticos, vamos a llamarles al uso, no se ocupaban de Ceuta y Melilla en la medida que ceutíes y melillenses pedíamos. Es lo que ellos mismos (PP y PSOE) califican como ‘cuestión de Estado’. Es decir, Ceuta y Melilla son una cuestión de Estado. Y a partir de ahí empieza nuestra política. Nosotros decimos: No. Ceuta y Melilla, independientemente de la cuestión de Estado, merecen un trato digno y equiparable a cualquier otra región española. Ahí empieza la discrepancia y surgen los partidos localistas.
Dentro de la nueva política y de lo que representa Podemos, el respeto a la entidad e identidad de cada territorio, de cada ciudadano, es una prioridad. Nosotros confiamos en que esto se pueda cambiar. Y confiamos en que el Grupo Parlamentario de Podemos canalice ya de verdad esa hipoteca que tienen los de ‘la cuestión de Estado’ , los problemas de Ceuta y Melilla. Esperamos que sea así. Dicho esto, a lo mejor también nos llevamos una bofetada. En Ceuta y Melilla estamos acostumbrados a llevarnos bofetadas de todas las clases. De momento, lo que sí es cierto es que el comportamiento de PP y PSOE respecto a Ceuta y Melilla ya está demostrado. El de Podemos está por demostrar.
–Mañana (la entrevista se emitió el martes) no va a hacer falta ir a Madrid. Va a venir el presidente...
–No, el presidente no. Va a venir el candidato del Partido Popular.
–No lo sé. Yo se lo planteo como lo está presentando la Delegación del Gobierno...
–Los trileros, ésos son los trileros.
–Bueno, vale.
–Es que esto lo conozco yo.
–Bueno, vale. Si yo le iba a plantear otra cuestión...
–Es que le voy a decir una cosa. Lo quiero decir. Es que ésta es la segunda vez que vivimos esta experiencia. Es que ya vino el candidato Aznar a Ceuta. ¿Qué es lo que hacen? Nosotros (Ceuta) somos como el hijo ilegítimo, que se nos quiere mucho, pero en público no.
–Si sólo le quería plantear...
–Nooo. Es que esto a mí me indigna porque son unos tramposos. Porque el presidente del Gobierno no viene a Ceuta. Se ha ocupado muy mucho el Partido Popular de decir que viene a Ceuta el candidato del PP. Porque si viene el presidente del Gobierno, el rey Mohamed VI le da dos collejas al presidente del Gobierno y sale corriendo. Y esto es un problema para esta ciudad. Nosotros queremos que venga el presidente del Gobierno.
–Sólo le quería preguntar si le va a plantear algún asunto al presidente Rajoy.
–Ellos no quieren oír a esta ciudad. Nada más quieren hacerse la foto, presumir de que ha venido aquí el presidente del Gobierno, aún siendo mentira. Yo, lo más probable, es que le abuchee.
–¿Estará fuera de la Asamblea?
–Sí, creo que es lo que se merece el señor Rajoy, un abucheo de todos los españoles y de los ceutíes en particular.
–¿Tan mal lo ha hecho?
–Creo que el sufrimiento que ha infringido a millones de españoles y a miles de ciudadanos de Ceuta no tiene perdón.
–Después de las elecciones habrá que llegar a un acuerdo, quizá no convenga tensar ahora mucho las relaciones.
–Yo no tenso nada. Yo digo lo que pienso. A mí me parece tan injusto, me parece terrible lo que han hecho con millones de personas: los desahucios, la precarización del trabajo... Ver a gente joven ganando 500 euros al mes... No me parece que eso se pueda perdonar.
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