Los ingresos netos de la Administración rozaron los 235 millones y los pagos realizados fueron casi 253.
La Ciudad Autónoma cerró el año pasado con un índice de pago de gastos (que refleja el porcentaje de obligaciones reconocidas durante el ejercicio con cargo al presupuesto corriente que han sido pagadas durante el mismo) superior al 92%. Este indicador mide la capacidad de la entidad pública para hacer frente a sus obligaciones, es decir, el ritmo de gasto en los conceptos de la clasificación económica de gastos seleccionados.
En términos absolutos y según los datos correspondientes al cuarto trimestre de 2015 de la Intervención de la Administración local, al término del ejercicio la Ciudad había abonado de forma efectiva un total de 252,9 millones de euros, dejando pendientes 16,9 millones de los 269,9 que se contabilizan como obligaciones reconocidas.
El índice de ejecución de gastos, que expresa el porcentaje que suponen las obligaciones reconocidas con cargo al presupuesto de gastos del ejercicio corriente en relación con el volumen de créditos definitivos, se quedó en un 88,8%.
Esta ratio muestra “el grado en que los créditos definitivos han dado lugar al reconocimiento de obligaciones”.
En el apartado de ingresos, el índice de ejecución retrata “el porcentaje de las previsiones definitivas que han dado lugar al reconocimiento contable de derechos liquidados”. La Ciudad dejó el suyo el año pasado en un 90,44%, porcentaje que da cuenta de “el nivel de rigor que caracteriza la confección de los presupuestos de los ayuntamientos y la medida en la que los gestores municipales ajustan sus previsiones a la realidad”.
Ingresos
Seis puntos por debajo (en un 84,1%) se quedó el índice de recaudación de ingresos, que refleja el porcentaje de derechos liquidados con cargo al presupuesto corriente que han sido cobrados durante el ejercicio presupuestario. Con este factor se mide la capacidad de la entidad pública “para transformar en liquidez los derechos de cobro liquidados y vencidos, es decir, el ritmo de cobro”.
En términos absolutos, la Administración autonómica ingresó de forma efectiva un total de 240,3 millones de euros y devolvió 5,3, con lo que de forma neta las entradas en caja se quedaron al borde de 235 millones de euros.
El volumen de deudores sobre unos derechos reconocidos netos de 279 millones se situaron al término del año pasado en 44,2 millones.
LOS NÚMEROS
Multas
Casi 430.000 euros. El Presupuesto de la Ciudad del año pasad preveía que la Administración ingresase más de 1,2 millones de euros en concepto de multas y sanciones, cantidad que han superado ligeramente los derechos reconocidos en ese capítulo. Los ingresos reales, sin embargo, no han llegado a 430.000 euros, y los deudores superan los 900.000 euros.
IBI
Más de 6 millones. La recaudación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) generó 6,1 millones en ingresos netos cuando la previsión del Presupuesto se situaba en 6,6 millones. El volumen adeudado se acerca a 1,5 millones.
Becas
Más de un millón. La Ciudad Autónoma abonó durante el año pasado algo más de un millón en becas y ayudas al estudio, capítulo que en el Presupuesto tenía 1,3 millones. La Intervención computa 147.065 como pagos pendientes y casi 50.000 de remanente.