La Ciudad tiene intención de convocar una Comisión Informativa de Medio Ambiente, que se centrará en el Mapa del Ruido, cuya aprobación inicial tuvo lugar en marzo de 2014 y que, a día de hoy, aún no se ha aplicado.
Este sería el paso previo de cara a elevar este asunto al Pleno de la Asamblea, que deberá aprobar el documento, para su posterior aplicación en la ciudad, explican fuentes del Ejecutivo autónomo.
En el informe del Mapa del Ruido se realiza una evaluación global de la exposición actual a la contaminación acústica de la población, se determina además que el 24% recibe un impacto que supera los 65 decibelios de media durante las 24 horas del día, lo que equivale a unos 19.200 ciudadanos.
En España se establece como norma general que el nivel de confort acústico está situado en los 55 decibelios y por encima de este nivel, el sonido resulta pernicioso para el descanso y la comunicación.
De hecho, el ruido es percibido por los ceutíes como un problema ambiental “destacado”. La principal fuente de ruido es el tráfico que afecta de una manera extrema, con niveles por encima de los 75 decibelios a unas 400 viviendas y por encima de los 65 decibelios a más de 19.000 personas.
La coincidencia es tal que la población que se estima que está expuesta a niveles elevados de ruido se concentra en las zonas con más densidad de circulación rodada. Según figura en el documento, en el área comprendida entre las calles Jáudenes e Independencia, el 69% soporta más de 60 decibelios por la noche y el 40% más de 70 decibelios en horas diurnas. Por esta vía circulan más de 1.500 coches cada hora, unos 25.100 diarios.