La selección española, que capitanea el ceutí Guillermo Molina, sucumbió ayer ante el combinado de Grecia y quedó apeado de la lucha por las medallas. El equipo español no había perdido ni un encuentro en el Europeo y ayer no estuvo a la altura de Grecia, que sólo había conseguido una victoria hasta este momento.
Guillermo Molina no estuvo tan fino como en otras ocasiones y ayer no pudo aportar ni un sólo tanto y eso se notó.
Comenzó mal la selección española, ya que en los primeros minutos salió algo dormida y eso fue aprovechado por Grecia para coger cierta ventaja.
Dos tantos del griego Fountoulis ponían el nerviosismo en el combinado nacional, que nunca había estado por debajo en este Campeonato de Europa. Al final del primer cuarto, el 0-2 era favorable a Grecia, que había salido muy enchufada al partido.
El segundo cuarto también comenzó mal, ya que Mylonakis ponía el 0-3 en el marcador y dejaba el choque para los españoles muy cuesta arriba. En los últimos segundos de este tiempo, la selección nacional echó casta de su mejor versión y consiguió marcar un tanto para reducir la diferencia en el electrónico. Al descanso, Grecia se imponía por 1-3.
El combinado que dirige Gabi Hernández tenía que echar el resto para darle la vuelta al marcador. No lo tenía fácil, porque los griegos se mostraban muy superiores en defensa y eso impedía a los españoles lanzar con facilidad.
Cuando más necesitaba los goles España, llegaron dos tantos de Grecia que dejaron el choque muy cuesta arriba. El combinado nacional logró un gol a falta de pocos segundos del final del tercer cuarto y eso le dejó a tres de distancia.
Las cosas no pintaban bien y terminaron de ponerse peor con otro tanto de Grecia, que ponía el encuentro en el definitivo 2-6. Los españoles se quedaban fuera de la lucha por el podio y ahora tendrán que pelear por el quinto puesto del Europeo de Belgrado.