Los ceutíes mantienen la tradición. Aunque muchos prefieren las uvas peladas y enlatadas, otros se resisten y optan por comprarlas en el Mercado y prepararlas en casa
Los ceutíes volverán a dar la bienvenida al año con un dulce bocado, o 12, para ser más exactos. La tradición se mantiene y aunque se comercialicen ya peladas y enlatadas, numerosos ciudadanos prefieren comprarlas en el Mercado y pelarlas. Son las tradicionales uvas de Año Nuevo, el producto más demandado en la mañana de ayer en el Mercado Central. Mustafa no paraba ayer de trabajar en su puesto, donde vendía kilos y kilos de uvas. Sobre la una del mediodía había vendido ya unas 10 cajas de entre 5 y 7 kilos cada una. “Estamos intentando que la tradición se mantenga. Ahora venden también las uvas enlatadas pero no es lo mismo, la tradición es comprarlas en el puesto, como se ha hecho toda la vida”, afirma este comerciante en declaraciones a este medio. En el puesto, Ana compra un kilo de uvas y mientras explica a este medio que aunque las vendan enlatadas, ellas las prefiere comprar aquí, “porque es una tradición, como un ritual en el que pelas las uvas y las separas en platitos de doce en doce para toda la familia”. Junto a ella, Inés también pide uvas y explica a este medio que otros años las ha comprado enlatadas pero que las prefiere comprar en el Mercado y prepararlas en casa. “Casi siempre los niños son los que se entretienen en pelarlas y separarlas en platitos para ponerlas en la mesa”, indica. El precio de las uvas se ha mantenido respecto al año anterior, 2,80 euros el kilo, aproximadamente, y la gente las pide “pequeñas, doradas y que se pelen bien”.