El mensaje se lo envió la consejera de Economía, Hacienda y Administración Pública, Susana Román, a los partidos de la oposición en dos ocasiones.
Cuando estaba finalizando su discurso, en la primera de las intervenciones, les comentó que confiaba en que presentaran alternativas a las cuentas públicas para enriquecer las mismas, además de solicitarles que todos remaran en la misma dirección. Casi tres horas después, cuando todos los portavoces habían hecho uso de la palabra y ya habían anunciado que votarían de manera contraria a los presupuestos presentados por el Gobierno del presidente Vivas, les espetó que había estado escuchando atentamente a lo largo de todo ese tiempo y que no había visto ni una sola propuesta que viniera a que se pudiera introducir en los presupuestos, con lo cual entendía que ahora aprovecharían el período de alegaciones que se abriría para que todos los que quisieran, incluidos los propios partidos políticos, presentaran sus propuestas.
Y es que tras la aprobación inicial de los presupuestos de la Ciudad Autónoma para el año que viene continua el peregrinar de este documento que no finalizará hasta la época de las vacaciones navideñas, lo más probable, entre la Nochebuena y el fin de año y seguro después de la celebración de las elecciones generales del próximo veinte de diciembre.
Los presupuestos ahora se expondrán al público por el período establecido en la legislación y durante ese tiempo todas las personas que lo deseen pueden presentar las correspondientes alegaciones y entre ellos, como decíamos antes, los propios partidos políticos. A buen seguro que PSOE, Ciudadanos o el Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía aprovecharán esta coyuntura para aportar determinadas ideas de sus programas electorales, aunque en el caso de Caballas, tal y como nos ha venido acostumbrando a lo largo de la pasada legislatura, lo más probable es que ponga encima de la mesa un presupuesto alternativo para marcar diferencias, no solamente en prioridades con el Gobierno de la Ciudad, sino también con sus compañeros de bancada de la oposición.
Cuando todas esas alegaciones ya estén presentadas en la Consejería de Economía, Hacienda y Administración Pública serán los técnicos de esta área los que informarán a la consejera sobre el contenido y la posibilidad de aceptación de las mismas, aunque, luego, por supuesto, también existe un componente político importante que es esencial a la hora de pasar el filtro del equipo de gobierno y que pudieran tener salida con su incorporación al texto definitivo. Pero lo mismo sucederá con particulares, asociaciones u otro tipo de organizaciones que después de estudiar las cuentas públicas, lo mismo igualmente hacen sus propuestas.
Luego, antes de ser sometidas de manera definitiva a un segundo pleno de la Asamblea que es el que daría la luz verde definitiva, estaría la celebración de una nueva Comisión de Cuentas que es la encargada de servir de tamiz y el informe que de ella salga será el que apoyará el Gobierno del presidente Vivas. Aunque para entonces no se esperan ‘fideladas’ como las de la líder de MDyC.