La consejera de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed, negó ayer que los supuestos retrasos en la renovación de los convenios que la Ciudad suscribe con organizaciones humanitarias hayan dejado a familias en riesgo de exclusión sin coberturas o prestaciones con los que afrontar el día a día.
Respondía así a la denuncia lanzada el viernes por MDyC, el partido creado por la diputada Fatima Hamed, que en un comunicado de prensa acusaba a la Administración local de dejar a las entidades sociales “sin fondos por una ineptitud” en la tramitación administrativa de esos acuerdos. En declaraciones a El Faro, Mohamed tachó de “injustas” y “erróneas” las críticas porque, puntualizó, la Ciudad mantiene en vigor convenios con numerosas organizaciones, de forma que ante problemas puntuales en cualquiera de ellas los usuarios son derivados de forma automática al resto. “Ninguna persona que necesite nuestra atención queda desamparada. Eso es rotundamente falso”, replicaba ayer la consejera. Como ejemplos, citó los casos de Cruz Blanca, entidad respaldada con 800.000 euros, o Septem Solidaria, que también cubre necesidades básicas gracias a un convenio de 70.000 euros en vigor hasta el mes de junio. Son sólo dos de las entidades que en estos momentos dan cobertura a miles de familias en toda la ciudad. “No todo vale, y más en cuestiones tan sensibles como éstas y en las que el Gobierno local está volcado, como demuestran los Presupuestos de la Ciudad”, añade Mohamed. Sobre el caso concreto del convenio con Cáritas, diana de las críticas de MDyC, la consejera asegura que los trámites para la renovación se cerraron el día 20 y el expediente está ya en manos de Intervención para su inmediata fiscalización. Según sus previsiones, el Consejo de Gobierno le dará luz verdeel próximo viernes. Asuntos Sociales rebate los reproches sobre su supuesta “inacción” incidiendo también en la reciente aprobación de convenios con Digmun o el Banco de Alimentos, o las presiones ejercidas en Madrid para que la dotación del Fondo contra la Pobreza Infantil haya escalado hasta 1,3 millones de euros.
“Estamos en precampaña, pero no todo vale”
Mohamed asegura que acepta la crítica, pero siempre que se asiente sobre datos objetivos. “Entiendo que estamos en precampaña pero no todo vale, y menos cuando se trata de culparnos de falta de sensibilidad con los que menos tienen, con los que la Ciudad está volcada”, subraya. A MDyC, que el viernes emitió un comunicado titulado “Váyase, señora Mohamed”, le replicó ayer, con ironía, “que sí, me iré, pero como todos porque hay elecciones en mayo”.
Dudas sobre las cifras “redondeadas”que suele arrojar EAPN
Los informes de EAPN, la Red Europea contra la Pobreza y la Exclusión Social, colocan de forma periódica a Ceuta en cabeza del ranking de comunidades con mayor porcentaje de población en riesgo de exclusión. La Ciudad insiste en que esos indicadores son dudosos, sobre todo los que revelan que casi la mitad de los residentes viven en condiciones de extrema precariedad. Mohamed asume que en Ceuta sobreviven cientos de familias con escasos recursos, pero matiza que Asuntos Sociales prefiere manejar sus propios estudios, más reales y menos “redondeados”. “Son indicadores que globalizan y totalizan demasiado, que no coinciden con los estudios que nosotros realizamos”, advierte la consejera, convencida de que deberían tenerse en cuenta cuestiones trascendentales como las dificultades para llegar a final de mes, para afrontar una hipoteca o para costear alimentos y productos de primera necesidad, “y no tanto si hay posibilidad de comprarse un coche, de ir de vacaciones o de pagar la conexión a internet”. A su juicio, englobar todos los datos en un indicador único puede generar distorsiones en el dato final, algo que explicaría que no se adapte fielmente a la realidad. El desempleo continúa figurando para Asuntos Sociales como uno de los grandes lastres de la ciudad, consecuencia directa de las estrecheces del tejido económico.