Después de muchos meses de desasosiego, lo cierto es que la tranquilidad está a punto de llegar a muchos cientos de familias que, ahora mismo, tienen graves problemas a la hora de no poder pagar sus viviendas de protección oficial, como consecuencia de la crisis económica.
Una situación que lleva afectando ya un par de años y que por parte de la Ciudad Autónoma se abrió la posibilidad de refinanciar sus créditos a más años, pero el resultado de esta prueba tampoco ha sido óptimo, porque cuando se calculaban los intereses que se abonaban, resulta que esas viviendas al final terminarían costando el triple de su valor de inicio. Por ello, de la mano, tanto la Consejería de Fomento como la Consejería de Hacienda, Economía y Recursos Humanos han venido trabajando durante los últimos meses para contar con una salida a esta desazón que padecen muchos cientos de adjudicatarios de viviendas, que quieren abonar sus casas, pero que en realidad no pueden. En el paquete de medidas que llevará al Consejo de Gobierno de este viernes la consejera Román y que después deberá ser aprobado en pleno, en primer lugar no solamente se ampliará el número de año, con lo cual baja la mensualidad que se abona, sino que además los intereses pasarán de un cinco a un dos por ciento. Incluso, se abrirá la puerta para que algunas familias que, ahora mismo, tenían vetado porque no cumplían con los requisitos míniomo para acceder a estas fórmulas lo puedan hacer también sin ningún tipo de impedimentos.