UPyD señala que una de las últimas decisiones llevadas a cabo por los responsables políticos de la ciudad es la de no incluir en el pliego de condiciones en el proceso de licitación de la gestión de la Escuela Infantil “La Pecera” la realización de las actividades infantiles de tarde que se venían desarrollando desde hace varios años.
Estas actividades infantiles consistían en la realización de cursos (inglés, dibujo…) que ampliaban y complementaban las actividades que se desarrollaban en horario matutino suponiendo un refuerzo educativo al alumno. Para poder disfrutar de estas actividades complementarias los padres de los alumnos debían de hacer un pago extra de 50 euros mensuales. Una cantidad lo suficientemente asequible como para permitir a más de 150 alumnos, en su mayoría de origen humilde, participar en estas actividades.
Señala que “otra de las consecuencias de esta decisión ha sido el despido de las 16 empleadas que desarrollaban estas actividades para esos más de 150 alumnos. Un despido inesperado y fulminante con unas implicaciones bien conocidas por los miles de ciudadanos ceutíes desempleados. Estas empleadas realizaban una labor por el bien de la sociedad y que ayudaba a paliar los nefastos resultados educativos obtenidos en el informe PISA de 2009. A pesar de ser conocedores de todas estas consecuencias, los responsables políticos han considerado que su gestión pasaba por aumentar la intolerable cifra de desempleo de esta ciudad en 16 personas”.
han considerado que era adecuado el disminuir la oferta educativa de la ciudad al prescindir del servicio educativo desarrollado por esta escuela infantil en horario de tarde; tampoco les ha importado que la mayoría de estos niños no podrán desarrollar esas actividades en otro centro debido a las limitaciones económicas de sus padres. Todo esto bajo un único e interesado pretexto: recortar gastos.
incluir en el pliego de condiciones en el proceso de licitación de la gestión de la Escuela Infantil “La Pecera” la realización de las actividades infantiles de tarde que se venían desarrollando desde hace varios años. Estas actividades infantiles consistían en la realización de cursos (inglés, dibujo…) que ampliaban y complementaban las actividades que se desarrollaban en horario matutino suponiendo un refuerzo educativo al alumno. Para poder disfrutar de estas actividades complementarias los padres de los alumnos debían de hacer un pago extra de 50 euros mensuales. Una cantidad lo suficientemente asequible como para permitir a más de 150 alumnos, en su mayoría de origen humilde, participar en estas actividades.
Otra de las consecuencias de esta decisión ha sido el despido de las 16 empleadas que desarrollaban estas actividades para esos más de 150 alumnos. Un despido inesperado y fulminante con unas implicaciones bien conocidas por los miles de ciudadanos ceutíes desempleados. Estas empleadas realizaban una labor por el bien de la sociedad y que ayudaba a paliar los nefastos resultados educativos obtenidos en el informe PISA de 2009.
A pesar de ser conocedores de todas estas consecuencias, los responsables políticos han considerado que su gestión pasaba por aumentar la intolerable cifra de desempleo de esta ciudad en 16 personas; han considerado que era adecuado el disminuir la oferta educativa de la ciudad al prescindir del servicio educativo desarrollado por esta escuela infantil en horario de tarde; tampoco les ha importado que la mayoría de estos niños no podrán desarrollar esas actividades en otro centro debido a las limitaciones económicas de sus padres. Todo esto bajo un único e interesado pretexto: recortar gastos.