La Policía Local está recopilando los datos e información que permitan determinar si una joven de la ciudad pudo verse involucrada el pasado viernes, a primera hora de la mañana, en un caso de maltrato en el ámbito familiar.
Los hechos se produjeron el día 8, en torno a las 9:30 de la mañana, cuando los agentes que en esos momentos cumplían con su turno de vigilancia en la zona de Miramar se percataron de que varios vecinos de la barriada se agolpaban para intentar atender a una mujer que en esos momentos estaba sumida en una crisis de ansiedad y mostraba claros síntomas de nerviosismo.
Preguntados por los efectivos del Cuerpo, los mismos vecinos certificaron que minutos antes la mujer y otro joven allí presente se habían enzarzado en una fuerte discusión. Ante el estado que presentaba la mujer, los agentes solicitaron la presencia de una unidad del Servicio de Ambulancias, que la trasladó hasta el Hospital, hasta donde también se condujo al supuesto agresor en un vehículo policial. Ya en el centro sanitario, la afectada denunció que su expareja le había agredido con un arma blanca, sin que ésta pudiera ser localizada en el vehículo de éste, inspeccionado tras la entrega de las llaves, ni en las proximidades del lugar donde ambos participaron en la discusión. Una vez reconocidos y facilitados los partes facultativos, tanto la agredida como el supuesto maltratador fueron trasladados de nuevo hasta la Comisaría Central, donde se instruyeron las oportunidas diligencias.
De la investigación abierta se determinará si el caso puede ser considerado como de violencia de género por presunto maltrato, o intento de agresión, del hombre a su expareja. Desde los servicios de Asuntos Sociales de la Ciudad, así como desde los organismos dependientes de la Administración Central, se insiste en que se presenten las correspondientes denuncias en caso de indicios de maltrato familiar, así como la comunicación a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad.